TRIBUNALES INVESTIGACIÓN
El empresario cárnico Josep Puig-Gros confiesa ante el juez que mató a su cuñado
Compareció ayer a petición propia y reconoció que le disparó y que posteriormente trasladó el cadáver hasta Barcelona || Fue arrestado por los Mossos dos días antes de que hallaran a la víctima
El empresario cárnico Josep Puig-Gros Batsi confesó ayer ante el juez que el 19 de junio de 2017 mató a su cuñado Eduard Ardiaca Olalla, de 42 años, en el obrador de la empresa de Torre-serona. Fue una comparecencia a petición propia en el juzgado que investiga el caso. Puig-Gros, de Benavent de Segrià, también explicó que disparó a su cuñado durante una discusión y que, posteriormente, trasladó su cadáver hasta Barcelona. Hasta ahora, siempre había negado ser el autor pese a la multitud de inidicios que había contra él.
El crimen se produjo el lunes 19 de junio de 2017. Según Puig-Gros, durante una discusión con Ardiaca por temas económicos, forcejearon y acabó disparando a su cuñado. Posteriormente, trasladó el cadáver utilizando el coche de la víctima a Barcelona. Ese mismo lunes la mujer de la víctima y hermana del acusado denunció la desaparición. No fue hallado hasta el día 23 dentro del maletero de su vehículo en la calle Béjar de Sants. Los vecinos advirtieron a los Mossos d’Esquadra del hedor que salía de un Volkswagen Golf. Sin embargo, dos días antes del hallazgo (el día 21), la policía catalana citó al empresario cárnico a la comisaría de Lleida, donde le arrestaron como principal sospechoso de la desaparición, ya que todavía se desconocía el paradero de Eduard Ardiaca.
Los Mossos presumen que el asesinato tuvo lugar a primera hora de la tarde del lunes 19 en el obrador que la empresa familiar tenía en Torre-serona, en la que se encontraron casquillos de bala. Creen que Puig-Gros esperó a que Eduard Ardiaca entrara y le disparó por la espalda hasta en seis ocasiones. Posteriormente lo trasladó a Barcelona. En la primera declaración ante el juez, cuando pasó a disposición, el empresario admitió ante el juez que ese día estuvo en la capital catalana, pero dijo que fue por motivos financieros. Un día después (martes 20) acudió al campo de tiro para disparar, según los Mossos para tener una coartada en caso de hallarle pólvora en las manos. El móvil del crimen sería económico ya que Puig-Gros acumulaba deudas, entre ellas con su cuñado.
Los Mossos creen que planeó el asesinato durante dos semanas Los Mossos d’Esquadra creen que Josep Puig-Gros Batsi planeó el crimen durante las dos semanas anteriores. En este caso, podría ser acusado de un delito de asesinato y no de homicidio. Los investigadores también presumen que el crimen tuvo lugar a primera hora de la tarde del lunes 19 en el obrador que la empresa familiar tenía en Torre-serona, en la que se encontraron casquillos de bala. Creen que Puig-Gros esperó a que Eduard Ardiaca entrara y le disparó por la espalda hasta en seis ocasiones. Sin embargo, hasta ahora no han encontrado el arma del crimen. Al parecer, el autor la había destruido. También creen que buscó varias coartadas para no ser incriminado.