Los meteorólogos de La Pobla

Salían cada día a las 9 de la mañana al patio de la escuela de La Pobla de Cérvoles para anotar la temperatura máxima y mínima y la lluvia que había caído. También añadían si había niebla o si el tiempo era soleado. Los alumnos de mayor edad del centro participaron durante ocho años en las mediciones meteorológicas que impulsó un maestro nuevo que llegó en 1969, ahora hace justo 50 años. “Era un gran aficionado de la naturaleza y hacíamos muchas excursiones”, explicó Jaume Estradé, el alcalde y uno de los que partició en esta actividad. Las mediciones continuaron aproximadamente hasta 1977, cuando alguien rompió durante el verano los utensilios que usaban los niños. “Todo terminó de forma abrupta y nunca se supo quien fue el responsable de los destrozos”, señaló Jordi Estradé, quien aseguró que “el maestro quiso involucrar a los estudiantes para introducirnos en el mundo de la meteorología”.

Otros dos vecinos de La Pobla también recuerdan con nostalgia sus inicios en la meteorología y uno de ellos, Zacaries Sobrepere, cuenta con dos estaciones en el huerto de su casa y colabora con el Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat) y la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Sobrepere aseguró que “hacer mediciones en la escuela me influyó” y fue “la semilla que germinó después”. De hecho, ahora tiene datos recopilados de los últimos 35 años y se plantea elaborar un estudio para “analizar si el clima ha cambiado o no”. Sobrepere se puso en contacto con el Meteocat para recuperar las observaciones que hacían en la escuela y ahora el ayuntamiento está organizando un archivo municipal y quieren guardar las tablas que elaboraban cada mes y enviaban al antiguo Instituto Nacional de Meteorología, con sede en Zaragoza. Por su parte, Santi Borch apuntó que esta actividad que hacían cada día le “inculcó valores como la responsabilidad y la de tener obligaciones” y recordó que “al lado del termómetro y del pluviómetro plantamos unos árboles que ahora son enormes”.

La escuela fue la tercera en cerrar en Les Garrigues en seis añosLa escuela de La Pobla de Cérvoles ha cerrado este curso por falta de niños. Anteriormente habían cerrado en Les Garrigues las de El Cogul (2016) y Els Torms (2013), por lo que la de La Pobla fue la tercera en 6 años al no cumplir con las ratios de Educación, que está fijada en 5 estudiantes para mantener el centro abierto. De los 5 estudiantes que quedaban en el centro al terminar el curso, solo quedaron dos, porque uno se fue fuera de Lleida y otros dos marcharon a L’Albi. “Antes éramos muchos en la escuela”, aunque “ya hacía unos años que eran pocos niños”, explicaron el alcalde, Jaume Estradé, y un vecino de la localidad.