Detenidas seis personas por sustraer cableado telefónico en zonas rurales de Catalunya

Los Mossos d'Esquadra de la División de Investigación Criminal (DIC) detuvieron el martes a seis personas pertenecientes a una organización criminal dedicada al robo de cableado de las instalaciones telefónicas en zonas rurales de Catalunya, en las comarcas del Alt Empordà (Girona), Bages (Barcelona) y la Segarra (Lleida).

En un comunicado este domingo, la policía catalana ha informado de que los detenidos, que tienen edades comprendidas entre los 27 y los 51 años, se apropiaron de más de 35 kilómetros de cableado, lo que dejó durante días sin servicio de teléfono diferentes poblaciones de zonas rurales.

La investigación se inició en 2018 cuando los Mossos tuvieron conocimiento de que se habían producido 52 sustracciones de cable telefónico en diferentes puntos de la demarcación de Girona, de las cuales 29 se concentraban en la comarca del Alt Empordà.

Los ladrones sustrajeron 30 kilómetros de cableado, lo que causó unos daños valorados en más de 300.000 euros y supuso dejar sin línea telefónica a 5.519 afectados.

La investigación permitió identificar a los autores de los robos, que actuaban de noche, escogían zonas boscosas cercanas a carreteras secundarias y donde las líneas telefónicas estuvieran adyacentes a la vía, después descolgaban los cables sin llegar a cortarlos, así evitaban afectar el servicio telefónico.

Para comprobar si la instalación disponía de alarma, uno o dos días antes de materializar el robo volvían al mismo punto y seccionaban los cables, pero no se los llevaban, y finalmente volvían para seccionar el tramo descolgado y llevárselo a una zona agrícola en Ripollet (Girona), allí le retiraban el aislante para quedarse con el cobre.

Además, dos de los integrantes del grupo eran propietarios de una empresa de reciclajes de metales de Montcada i Reixac (Barcelona), que desde esta daban salida al cobre sustraído y para no levantar sospechas falseaban los libros de registro y las facturas.

Las investigaciones policiales acreditaron que el grupo también participó en otros cinco robos similares cometidos entre el 3 de enero y el 27 febrero de 2019 en poblaciones del Alt Empordà, Bages y la Segarra.

Los policías estimaron que utilizando este sistema, el grupo consiguió dar salida a un total de 17 toneladas de cobre robado, con las que habrían conseguido un beneficio superior a 72.000 euros.

Los detenidos, tras pasar a disposición judicial, quedaron en libertad con medidas cautelares.