Los Mossos multan a seis conductores al día por el uso del móvil en Ponent

Las sanciones por el uso del móvil al volante se han incrementado un 45% en el último año en Ponent, con seis multas de media al día. Las distracciones son la principal causa de siniestralidad con víctimas en carretera, por lo que los Mossos d’Esquadra proponen equiparar esta infracción administrativa con el consumo de alcohol.

Evitar las distracciones al volante sigue siendo una prioridad del Servei Català de Trànsit y de los Mossos d’Esquadra, que el año pasado imputaron a una media de seis conductores al día por usar el móvil en Ponent. Según los datos facilitados por la Policía catalana, en 2018 impusieron un total de 2.172 sanciones por utilizar el teléfono móvil al volante, lo que representa un 45% más respecto a las multas de 2017, que fueron 1.496. Al respecto, el jefe de Tráfico de los Mossos d’Esquadra en Ponent, Jordi Batista, señala a este diario que el uso del móvil ha pasado a ser la principal causa de accidentes con víctimas (heridos o fallecidos) en las comarcas del llano, provocando uno de cada cuatro siniestros en las carreteras. Según Batista, la salida de vía es el principal accidente que se registra en Ponent y se debe a dos causas: la velocidad inadecuada y la distracción. Esta última viene ligada al uso del móvil generalmente, una práctica extendida entre los conductores pese a su peligrosidad.

Para atajar esta imprudencia, los Mossos incrementaron los efectivos durante el año pasado e instan a potenciar las campañas de sensibilización para que llegue el mensaje a la población. En ese sentido, Batista recuerda que el uso del móvil causa más accidentes que el consumo de alcohol, por lo que se mostró partidario de equiparar la sanción administrativa por distracción (una multa de 200 euros y la retirada de tres puntos del carnet) a la alcoholemia no penal (multa de entre 500 a 1.000 euros y la retirada de entre cuatro y seis puntos). Una de las medidas que se han puesto en marcha para interceptar las imprudencias al volante son los vehículos llamados “espiell”. Como ya informó SEGRE, Lleida cuenta con dos patrullas de los Mossos d’Esquadra que recorren las carreteras con vehículos sin logotipar para “cazar” in fraganti a los conductores. “Los accidentes causados por el uso del móvil son difíciles de demostrar y se han convertido en un grave problema”, señala Batista. El jefe de Tráfico también apuesta por continuar con las charlas informativas a diferentes colectivos, sobre todo en las escuelas, para incrementar la concienciación.

Tasas de alcohol elevadas en algunos colectivos Los Mossos d’Esquadra también han detectado un aumento de las tasas de alcohol elevadas en algunos colectivos. Según Batista, se trata de población a la que no llega el mensaje de la administración para fomentar el consumo 0 de alcohol al volante. En Ponent, el año pasado se multiplicaron por tres las sanciones administrativas por consumo de alcohol, con más de 3.200. Por exceso de velocidad, el Servei Català de Trànsit inició un total de 107.125 expedientes sancionadores en la provincia de Lleida, lo que supone una media de casi 300 al día.