Alpicat destina 470.000 euros de superávit a finalizar obras

El ayuntamiento de Alpicat ha cerrado el ejercicio presupuestario de 2018 con un superávit de 470.000 euros, según aseguró ayer el alcalde, Joan Gilart, en una intervención para explicar la liquidación de 2018. Señaló que “es un paso más en la apuesta por el control del gasto que se ha conseguido aunque durante los últimos cuatro años no se ha incrementado ningún impuesto de los gestionados por el consistorio”. Las ayudas de las Diputación y el aumento en la recaudación del IBI por la regularización catastral, son otros factores que han ayudado a generar el superávit. Gilart indicó que esta cuantía se reinvertirá en los tres proyectos claves de este mandato que ya están iniciados y que se deben finalizar en los próximos años y que son la construcción del nuevo ayuntamiento en Cal Negre, una actuación paralizada a finales del año ante la previsión de un gran sobrecoste respecto al precio de la adjudicación; el nuevo pabellón polideportico y la segunda fase de renovación del alumbrado público. Gilart destacó que la ratio de la deuda municipal está situada en menos de 50% de los recursos ordinarios y que representa menos de 400 euros por habitante, un nivel bajo comparado con consistorios de municipios con una población similar. Añadió que la buena situación económica de las arcas municipales permitirá asumir estos grandes proyectos que ahora están en marcha. De la misma manera, el alcalde destacó que también se ha reducido el periodo medio de pago del ayuntamiento a sus proveedores que ha quedado establecido en 13,33 días de media durante todo el pasado año, muy por debajo de lo legalmente establecido. Cabe destacar que el Estado ha dado luz verde mediante una prórroga a que los ayuntamientos reinviertan sus superávits.