La Generalitat insiste en que Doctor Music conocía los riesgos de Escalarre

La Generalitat inistió ayer en que la promotora Doctor Music conocía la situación de inundabilidad de los prados de Escalarre, que ha provocado que la Agència Catalana de l’Aigua (ACA) vetara su celebración en el Sobirà y la empresa decidiera trasladar el certamen al circuito de Montmeló. La directora de Medio Ambiente, Marta Subirà, aseguró que “las conversaciones se iniciaron hace más de un año” y que “se alertó de que esta era una zona que planteaba bastante complejidad para ubicar un evento de estas características y a pesar de todo la empresa quiso probar de hacerlo ahí mismo”. Subirà reconoció que se planteó “redimensionar y que asistiese menos gente de forma que todas la piezas pudiesen ubicarse en espacios que no estuvieran en zonas inundables o de flujo preferente”, algo que la empresa declinó hacer. En relación al riesgo de inundaciones, Subirà señaló que “el hecho de que no se haya producido hasta ahora con los datos que tenemos no quiere decir que no se pueda producir” y recordó que “la riada de Biescas también cogió a todos por sorpresa”. “Nos encontramos en una zona especialmente delicada” donde “confluyen 5 afluentes y una serie de barrancos que harían que en caso de una tromba importante los sedimientos que podrían caer impedirían su laminación de forma adecuada”. En declaraciones a Els Matins de TV3, Subirà señaló que “lo que pretende la ley y la política de prevención de riesgos y el principio de precaución que estamos obligados a aplicar las administraciones hacen que no nos podamos arriesgar” a que “pueda producirse una desgracia de estas características”. Subirà aseguró que “tampoco se decidió por parte de los promotores buscar otra ubicación porque realmente tenían la intención de repetir aquello que se había producido hace 23 años”. Subirà explicó que el hecho de que el ACA haya vetado el certamen en Escalarre “no quiere decir que no se puedan organizar eventos en este ámbito, lo que es necesario es encontrar la manera de ubicarlos de forma adecuada”. “El festival y seguramente también el propio territorio estuvieron probando e intentando encontrar un encaje adecuado que finalmente no ha sido posible”, dijo.