Despliegan cinco jaulas en Aran y el Pallars Sobirà para capturar osos y colocarles un GPS

Generalitat y Conselh Generau han desplegado cinco jaulas en Aran y el Pallars Sobirà para capturar osos y colocarles un GPS en el marco del programa Piroslife. De esto modo esperan poder localizarlos como hacen con Goiat, el problemático ejemplar reintroducido en 2016 y que ya ha atacado este año a un primer potro tras la hibernación. Se trata de las mismas trampas que ya se instalaron el año pasado y que hasta ahora no han tenido éxito.

El Síndic de Aran, Carlos Barrera, explicó que estas jaulas se encuentran en sitios a los que se puede acceder fácilmente porque los agentes forestales se encargan de inspeccionarlas y de colocar carne en su interior como cebo. El objetivo de es “tener localizados a los ejemplares que están acostumbrados a pasar cerca de núcleos habitados”. Barrera apuntó que una de estas jaulas fue cedida por el Gobierno francés y otra se construyó en la Val. Asimismo, fuentes del Conselh apuntaron que se han instalado en lugares donde se ha detectado el paso de los plantígrados.

El ataque de Goiat el pasado fin de semana provocó que la Generalitat y el Conselh activaran la segunda fase del protocolo de intervención contra este ejemplar, que contempla medidas para ahuyentarlo e intentar modificar su conducta depredadora con pirotecnia o balas de fogueo o caucho (ver SEGRE de ayer). Fuentes del gobierno aranés apuntaron que el protocolo se activa “cada vez que se detecta que Goiat se acerca a ganado”. Las mismas fuentes señalaron que para poder pasar a la tercera fase (su extracción del Pirineo) se deben efectuar al menos tres intervenciones exitosas de disuasión en un periodo de dos semanas para intentar modificar su comportamiento sin conseguirlo. Será entonces cuando el Conselh Generau, la Generalitat y los gobiernos español, navarro y aragonés deberán decidir si se expulsa a Goiat.

Por su parte, el ganadero que descubrió los restos del potro muerto de Arres, Armand Castet, criticó el programa de reintroducción del oso en el Pirineo y la actitud de las administraciones frente a los ataques de los plantígrados al ganado.