Oliana y Peramola piden más seguridad en el puente que une ambos pueblos

El ayuntamiento de Oliana ha solicitado a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) conocer la titularidad del puente sobre el río Segre que une el municipio con el de Peramola, y que los vecinos conocen como la Palanca de Tragó. Se trata de la principal vía de acceso entre estos dos municipios del Alt Urgell y que los vecinos utilizan diariamente. El paso de los años y la falta de mantenimiento han provocado el deterioro de la infraestructura y ahora ambos ayuntamientos piden reforzar la pasarela. La CHE construyó el puente en el año 1983 como obra de reposición por los daños provocados por las riadas del 1982, cuando el agua se llevó e hizo desaparecer la pequeña palanca que conectaba la margen derecha y la izquierda del río. Ahora, 37 años más tarde, los ayuntamientos aseguran que no disponen de documento alguno que estipule de la propiedad del puente para saber a quién corresponden las obras a las que se debería someter esta infraestructura. El alcalde de Oliana, Miquel Sala, explicó que una primera memoria cifra en 160.000 euros las obras para mejorar la seguridad del puente. Los responsables aseguran que “el 20% de las sirgas que sirven de anclaje necesitan ser sustituidas” y que también es necesario actuar sobre el pavimento y las barandillas de seguridad. Por su parte, Gemma Orrit, alcaldesa de Peramola, reconoció ayer la necesidad de mejorar la infraestructura y aseguró que “a pesar de disponer también de la carretera que transcurre sobre el puente de Nuncarga, los vecinos utilizan la palanca de Tragó porque es un recorrido más cómodo, directo y mucho más rápido”. Fuentes de la CHE, por su lado, explicaron que el organismo “únicamente repuso un puente ya existente construido en los años 30 cuya titularidad es de la Diputación”, dijeron.