CRONICA DESDE
Fin o reinicio de la planta de compostaje
Ossó de Sió.
O ssó de Sió hace más de una década que batalla por la polémica planta de compostaje que quiere impulsar uno de sus vecinos en unos terrenos dels Plans de Conill calificados como zona de especial protección para las aves (ZEPA). En un principio, el proyecto contaba con el rechazo rotundo de la mayoría de los vecinos de este municipio de la Vall del Sió, en el Urgell, si bien con el tiempo éstos han pasado de una total oposición a la resignación y aceptación, por lo que en el municipio prevalece la calma. Los vecinos solo piden que “en caso que la planta de compostaje acabe construyéndose -que ven difícil- el promotor respete el proyecto final y las limitaciones impuestas por el consistorio”, por las que éste último ha luchado incansablemente hasta conseguir que la planta pueda tratar un máximo de 13.310 toneladas anuales de deyecciones ganaderas (en un primer proyecto eran 20.000) procedentes únicamente de las explotaciones de su propietario y nunca podrá llevarse a cabo una ampliación.
Aunque en Ossó de Sió se respire armonía, otras poblaciones más cercanas a los terrenos donde está proyectada la planta de compostaje como la Figuerosa, núcleo agregado de Tàrrega, o Conill no lo ven igual porque consideran que este proyecto les “hipoteca de por vida” y pone en riesgo negocios que están impulsando relacionados con el turismo rural, la sostenibilidad y la biodiversidad ambiental, motivo por el que han impulsado la plataforma Salvem Els Plans de Conill, que ha llevado el proyecto de la planta de compostaje a tribunales. A principios de abril el Juzgado Contencioso Administrativo número 1 de Lleida revocó las licencias ambiental y de obra de la planta. Sin embargo, el promotor no quiere tirar aún la toalla y ha presentado recurso. Ahora el caso está en manos del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC), que deberá decidir si ratifica la sentencia o la tumba de modo que el próximo ayuntamiento podría afrontar el final de este proyecto o su nuevo impulso. En Ossó se presentan tres candidaturas de las que solo una está formada por un grupo de personas, la del actual alcalde, Antoni Gilabert, que lidera una lista de independientes bajo las siglas Fem Municipi (AEO). Gilabert se estrenó en el cargo el pasado 2015 en sustitución de Josep Maria Pedró. Las otras candidaturas son Independents per Ossó de Sió-Acord Municipal (IO-AM) con Pere Vall y Compromís x Ossó de Sió-Candidatura de Progrés (CxOS-CP), lista fantasma con Silvia Caravaca. En Ossó, las listas son abiertas y se vota a las personas.
Mayora: “No heredaremos un vertedero de excrementos” Xavier Mayora, vecino de la Figuerosa y miembro de la plataforma Salvem Els Plans de Conill, dijo que “esta planta en un espacio natural es una aberración, no tiene ningún sentido ahora que queremos proteger el medio ambiente y potenciar el valor paisajístico”. Según Mayora, “no es justo que para complacer los intereses de un sector concreto como es la industria agroalimentaria y de un particular en este caso, tengamos que recibir de herencia un auténtico vertedero de excrementos de granjas en un espacio natural protegido, hecho inverosímil que no nos acerca a Europa sino que nos aleja”. Otro de los opositores de la planta de compostaje es Emili Vives, propietario del pueblo abandonado de Conill que proyecta recuperarlo para convertirlo en sede de artistas, que considera la actividad de la planta incompatible con su proyecto. Conill es el pueblo que está más cerca de los terrenos donde debe ir la planta, a escasos 800 metros.