SEGRE

Aguas bravas y aguas revueltas

Sort encara nuevos proyectos tras un mandato complicado por dificultades económicas

Las obras del Campo de Regatas de Sort para adecuarlo a los requisitos del Mundial de piragüismo de estilo libre de este año.

Aguas bravas y aguas turbiasAmado Forrolla

Creado:

Actualizado:

Una alianza tras las elecciones de 2015 puso fin a 24 años de gobiernos de la antigua CiU en Sort. El relevo llegó con dos partidos que nunca habían tenido ni un solo edil en el ayuntamiento: la CUP y Fem Municipi (FEM), una formación de ámbito comarcal. En cambio, fuerzas tradicionales como el PSC y ERC quedaron fuera del consistorio. Fue la primera sopresa de 4 años en que lo inesperado se convirtió en frecuente en la capital del Pallars Sobirà. A los pocos meses salió a la luz que el Estado y la Generalitat reclamaban al ayuntamiento casi un millón de euros por ayudas concedidas en mandatos anteriores para obras que no se habían ejecutado. Devolver esta suma, que equivalía a la mitad del presupuesto municipal, lastró las cuentas locales durante años. En el ecuador del mandato llegó otra sorpresa y tampoco fue agradable: el consistorio tuvo que regularizar edificios pú- blicos que recibían electricidad de forma ilegal, sin contadores o con luz provisional de obra. Discrepancias entre el director del Museu de les Papallones y el consistorio acabaron con el traslado de la colección a Ribera de Cardós, y el edificio de Pujalt pasó a acoger actos culturales. La promoción de la cultura, con iniciativas como una revista y proyecciones de cine, ha caracterizado este mandato. También algunas obras ilustran los últimos años de la historia de Sort. La primera es la piscina, fruto de “reciclar” la piscina cubierta inacabada. Supuso convertir un proyecto millonario y descartado por inviable en otro asumible para las arcas locales. Otra es el canal de regatas, en construcción tras quedar paralizado a raíz de una denuncia ecologista. Se reanudó poco después, aunque la suspensión provocó protestas, tal como sucedió con el rechazo al festival Doctor Music en Escalarre. Una nueva rampa en la presa del Hostalet facilita navegar 50 kilómetros desde Llavorsí sin bajar de la barca. Otro proyecto relevante es el de la biblioteca inacabada. El mandato comenzó con la exigencia de devolver 600.000 euros en ayudas para construirla; y acaba con un convenio con el Incasòl para reanudar la obra en junio e invertir 311.452 euros. Las nuevas elecciones llegan con cambios en las candidaturas. El alcalde, Raimon Monterde opta a la reelección pero no con FEM. Encabeza una agrupación de electores, Som Poble, con Baldo Farré y Pere Basconés, ediles de la CUP. Esta formación apoya la candidatura y no se presenta. En cambio, FEM sí lo hace con la edil Magdalena Barbero al frente y coaligada con ERC. Los dos partidos se presentan juntos en toda la comarca. La edil de PDeCAT Imma Gallardo es la alcaldable de Junts per Sort. Reivindica que anteriores consistorios de CiU trabajaron para conservar ayudas y trazaron proyectos materializados en este mandato. El PSC aspira a recuperar la representación con José Antonio Manrique como candidato.

tracking