Casi 500 hectáreas de turismo

El Aiguabarreig Segre-Cinca es uno de los principales atractivos turísticos del Baix Segre. Son casi 500 hectáreas comprendidas entre La Granja, Massalcoreig, Seròs y Mequinensa (Baix Cinca) y es uno de los humedales más importantes de toda Catalunya. Hasta hace relativamente poco, parecía que La Granja viviera de espaldas al río y a este paraje natural, pero en los últimos años se ha empezado a explotar el potencial turístico y medioambiental que tiene la zona, donde confluyen las aguas de los ríos Segre y Cinca, que atrae año tras año a miles de turistas. En 2012 se inauguró un camino natural de 6 kilómetros y medio que recorre la ribera del río hasta el límite con el término municipal de Seròs. Asimismo, el Aiguabarreig entró hace dos años en los Espais Naturals de Ponent, entidad que lidera la Associació Leader Ponent y que ha organizado actividades para potenciar este enclave, como por ejemplo anillamientos de aves. Esto supuso también que La Granja, Massalcoreig y Seròs firmaran un convenio de colaboración para llevar a cabo actuaciones de mejora del entorno. Mientras, también se ha habilitado un área de estacionamiento para autocares y visitantes.

Uno de los proyectos que deberá afrontar el ayuntamiento que surja tras las elecciones del 26-M será la gestión de las autocaravanas y construir un área de parking para estos vehículos. También tendrá que seguir explotando todo el potencial turístico del Aiguabarreig, que supondría a la vez una mejora de los servicios en el municipio. Asimismo, La Granja ha sabido aprovechar el atractivo de la floración y es uno de los municipios que reciben a los turistas atraídos por el mar de flores de los frutales, del mismo modo que en otros municipios del Baix Segre como Aitona o Torres de Segre.

La iglesia de Sant Jaume tuvo que cerrar durante nueve meses para poder reparar el tejado

La Granja vio en 2017 cómo cerraba la iglesia de Sant Jaume por problemas estructurales en el tejado. Debido a las obras que tuvo que ejecutar el obispado en la cubierta, el templo estuvo cerrado durante nueve meses y las misas se trasladaron a la sacristía o a locales cedidos por el ayuntamiento cuando se trataba de ceremonias en las que había una mayor afluencia de fieles. El obispo de Lleida, Salvador Giménez, ofició la misa de reestreno de la iglesia en enero de 2018, después de que el obispado invirtiera 90.000 euros en las obras. En la misma línea, el ayuntamiento ha ido rehabilitando a lo largo de los últimos años la ermita de Sant Jaume, que data de finales del siglo XVII, aunque fue ampliada durante el siglo XVIII.

En cuanto a infraestructuras, este mandato se ha impulsado el proyecto de la nueva variante que deberá enlazar la carretera LP-7041 con el camino de Maials, para sacar del centro urbano los camiones y la maquinaria agrícola. Por el momento se han construido unos 600 metros y queda pendiente una tercera actuación para que esté totalmente lista. En este sentido, el ayuntamiento quiere ahora que la Generalitat ejecute esta tercera fase dentro del proyecto de la nueva carretera entre Riba-roja (Tarragona), Almatret y La Granja.

Este municipio es uno de los 22 pueblos del Segrià donde se implantó la recogida de basuras puerta a puerta. La localidad cuenta con una guardería, que acoge también a niños de Seròs o Mequinensa. La Granja tiene también escuela, que forma parte de la zona de escolarización rural (ZER) L’Oliver, que engloba también a Maials, Llardecans y Massalcoreig.