TRIBUNALES JUICIO
El dueño y el ganadero de una granja de Arbeca se culpan de verter purín
Se enfrentan a una petición de más de 6 años de cárcel por arrojar 20.000 litros de excrementos en el Canal d’Urgell || El suceso afectó al agua de boca de la localidad
Los tres acusados, ayer en el banquillo de la Audiencia de Lleida.
El propietario de una granja de Arbeca y el ganadero que se encargaba de los cerdos de la explotación se acusaron mutuamente ayer en la Audiencia de Lleida de ser los responsables de un vertido de 20.000 litros de purines en el Canal d’Urgell que afectó a más de 20.600 metros cúbicos de agua destinada al consumo humano en el municipio de Arbeca. La Fiscalía, en un juicio que continuará hoy, solicita una condena de seis años y cuatro meses de prisión por un delito contra los recursos naturales para el propietario de la granja, el ganadero y para el responsable de la empresa integradora.
El dueño de las instalaciones aseguró que alcanzó un acuerdo verbal con el ganadero para que se hiciera cargo de la explotación “para ayudar a mis padres, por lo que puse la granja al nombre de mi sociedad”. También añadió que acordaron ir al 50% de ingresos y gastos pero que el encargado de la gestión era el ganadero. Sin embargo, este le contradijo y afirmó que “yo solo tenía encargado el cuidado de los animales; el propietario era el encargado de gestionar los purines y el mantenimiento de la granja”. Una instalación que no tenía licencia y era para un máximo 810 animales de engorde pero que en realidad, según la Fiscalía, acogía a 1.400 entre cerdos para engorde y lechones, algo que no rebatieron los acusados. El responsable de la empresa integradora declaró que desconocía que no tuvieran los permisos correspondientes “y tampoco era responsabilidad de nuestra firma encargarnos de las deyecciones”.
La granja no tenía la licencia en vigor y había casi 600 cerdos más de los permitidos
El vertido, de 20.000 litros de excrementos, se produjo la madrugada del 29 de septiembre de 2015 cuando los purines salieron de forma incontrolada de una nave donde estaban almacenados de forma ilegal. Un miembro de la Comunitat General de Regants dels Canals d’Urgell explicó que tuvieron que actuar de urgencia y tirar un total de 20.654 metros cúbicos de agua, que estaba en ese momento almacenada para consumo humano en Arbeca. Un técnico del ayuntamiento añadió que afectó “al agua que tiene el pueblo para tres semanas” y que observó los purines dentro del canal. El arquitecto municipal aseguró que los responsables de la instalación no hicieron los controles necesarios antes del vertido.
