Barrera se va cargando contra Goiat y dice que pone en riesgo toda la reintroducción del oso

El actual Síndic de Aran, Carlos Barrera (CDA), oficializó ayer su renuncia al acta de edil electo en el Conselh ante la Junta Electoral Provincial tras 20 años de forma interrumpida en el cargo, como ya avanzó SEGRE. CDA perdió las elecciones del 26-M al Conselh y Unitat d’Aran obtuvo mayoría absoluta, por lo que Paco Boya será el nuevo Síndic. Barrera aseguró tras su renuncia que entre los retos de futuro de la Val está la gestión de los osos y afirmó que Goiat pone en riesgo la reintroducción de la especie por sus reiterados ataques. Señaló que las administraciones firmantes de la reintroducción (España, Catalunya, Aragón, Navarra y Francia) “tendrían que ser los primeros interesados en extraer a Goiat del medio” porque “ha vuelto a poner en crisis la reintroducción”. Barrera aseguró que el oso no se ha convertido en un atractivo turístico ni en un dinamizador económico.

El actual Síndic no dejará la presidencia de CDA y seguirá “trabajando para el partido” e intentará “ilusionar a nuevos valores” para “dejar las cosas estructuradas para las próximas elecciones”. No obstante, aseguró que no tiene la intención “de ser vitalicio en ningún sitio”. Otros de los proyectos para el futuro de la Val Aran son, según Barrera, “hacer crecer el uso social del aranés” y la mejora de la N-230. El ministerio de Fomento presentó el año pasado varias alternativas para esta carretera, aunque el Síndic en funciones aseguró que desde CDA defienden que “son inaceptables para el territorio por el impacto que comportarían para Aran”.

Barrera aseguró que sus 20 años como Síndic han sido de “dedicación firme y convencida” y agradeció el trabajo y esfuerzo de los conselhèrs que lo han acompañado. La número 2 por Castièro (terçon por el que Barrera consiguió su escaño), la actual conselhèra Anna Díaz, también renunció a su acta y su lugar lo ocupará la número 3, Rosa Maria Salgueiro, quien podría renunciar como concejal en Vielha. El portavoz de CDA será el actual alcalde de Naut Aran, César Ruiz-Canela. El Síndic en funciones remarcó que el último mandato ha sido complicado por el contexto político catalán y que por el 1-O “intentamos mantener, y creo que lo conseguimos, la neutralidad del Conselh como institución”. Asimismo, pidió a Boya, a los nuevos conselhèrs y al pueblo aranés que no vean a la Generalitat como “un enemigo” y añadió que hacerlo sería “un error estratégico de dimensiones descomunales”.