NATURALEZA
Preocupación por la presencia del oso en zonas del Pallars excluidas del programa de agrupación de rebaños
Malestar del sector por la presencia en la zona del país con más densidad de animales durante el verano
Los ganaderos de las montañas de Llessui, Caregue y Escàs aseguran haber sido alertados, este fin de semana, de la presencia del oso Goiat en esta zona del Pallars Sobirà. Los pastores, sabedores de la presencia del plantígrado cerca de los pueblos han pasado la noche en la montaña vigilante los rebaños para evitar ataques. Xavier Ribera, presidente de la Asociación de ganaderos del Pallars Sobirà, ha explicado que los ganaderos se tienen que dedicar a "cuidar los rebaños" y no a "vigilar el oso".
Ribera ha denunciado que el Gobierno, el año pasado, excluyó estas montañas del plan de agrupación de rebaños argumentando que no era zona de presencia del oso. El presidente de los ganaderos ha querido hacer patente el malestar de todo el sector y la preocupación que representa la presencia del oso en la zona del país con más densidad de animales durante el verano, con más de 25.000 ejemplares entre ovejas, vacas y caballos.
Ribera ha explicado que este malestar del sector lo harán visible en una "gran" concentración de todos los ganaderos del Pirineo en el Valle de Àssua, coincidiendo con el día en que suben las ovejas a la montaña. Entre las montañas de Llessui, Caregue y Escàs se reúnen más de 15.000 ovejas.
La Asociación de ganaderos pide una rectificación a la Dirección General de Políticas Ambientales y Medio Natural y que reconozca que esta zona del Valle de Àssua sí que hay presencia de oso.
Con respecto a la política de reeducación de Goiat, echándolo con el uso de pirotecnia, de balas de fogueig o balas de caucho, por Ribera, cree que ha quedado demostrado que únicamente lo desplaza de unas zonas en otras, en este caso de la Val d'Aran, al Pallars. Ribera ha reiterado que la ganadería extensiva y la presencia del hueso en las montañas es "imposible".
Ribera se ha mostrado contundente y ha afirmado que vuelan fuera de este "ocupa" de sus montañas, muchas de propiedad privada o comunal. Para los ganaderos el único problema no es el hueso Goiat, el más controvertido entre la cuarentena que habitan en el Pirineo, dado que si se extrae, todavía quedarán más de cuarenta.
Agrupación de rebaños
La agrupación de rebaños es una medida de protección que consiste en agrupamientos de ganado vigilados durante los meses que las ovejas están en la montaña. Se trata de una de las medidas preventivas puestas en marcha, dentro del proyecto PirosLife.
En total, el año 2018 se organizaron 6 agrupamientos de rebaños protegidos, con cerca de 5.600 ovejas y cabras de 36 propietarios y ganaderos diferentes, que voluntariamente se valer acoger a esta medida preventiva gratuita que ofrece la Generalitat de Catalunya y el Conselh Generau de Arán. Concretamente, fueron los agrupamientos de Gausac-Casau y Bagergue, en la Val d'Aran; y los de Isil, Tavascan, Bonaigua y BoldísÀreu, en el Pallars Sobirà. En la Val d'Aran se agruparon unas 2.000 ovejas de 24 propietarios diferentes, mientras que en el Pallars Sobirà, la protección mediante esta medida llegó además de 3.600 animales de 12 propietarios.
De esta medida, el año pasado quedó excluida el Valle de Àssua para primera vez. La misma zona donde este fin de semana han alertado a los ganaderos de la presencia del hueso. En estas montañas pasan los meses de verano más de 15.000 ovejas.