HOMENAJE MEMORIA HISTÓRICA
El Vilosell rinde homenaje al 'bibliotecario' de Mauthausen con su biblioteca La Clandestina
El president Quim Torra se compromete a proporcionar los libros que necesite la nueva sala de lectura || Joan Tarragó, deportado al campo nazi en 1941, logró reunir hasta 200 obras de grandes autores
La biblioteca-sala de lectura de El Vilosell estrenó ayer su nuevo nombre, La Clandestina, en homenaje a Joan Tarragó, nacido en este municipio de Les Garrigues y que fue el artífice de crear una biblioteca clandestina en el campo de concentración de Mauthausen. Un acto de memoria y de recuerdo que contó con la presencia del president de la Generalitat, Quim Torra, quien se comprometió a que el departamento de Cultura proporcione los libros que “hagan falta” a este nuevo espacio de lectura. Dos hijos de Tarragó, Llibert y Joan Ramon, estuvieron presentes en la inauguración y agradecieron este homenaje “a alguien que ha luchado en los campos de concentración”. Según explicó Llibert Tarragó, su padre fue deportado a Mathausen en 1941 y dos años después creó una biblioteca clandestina en la barraca número 13, foco de la resistencia republicana. “Al llegar los primeros convoyes con deportados franceses e italianos, los republicanos españoles que recogían sus pertenencias se dieron cuenta de que había muchos libros. Mi padre se enteró y decidió crear una biblioteca a espaldas de los nazis”, explicó. En esa barraca llegó a reunir unos 200 libros de grandes autores como Émile Zola, Víctor Hugo, Fiódor Dostoievski o Stendhal. “Estos libros les servían a los deportados para escaparse del infierno durante unos minutos”, señaló Tarragó. Tras ser liberado de Mauthausen en mayo de 1945, Joan Tarragó regresó a Francia, donde vivió hasta su muerte, en 1979.
En la misma línea, Torra afirmó que Joan Tarragó “sabía que allí donde hay un libro hay una oportunidad de vivir” y remarcó que gracias a su biblioteca clandestina “fue capaz de llevar vida al infierno de Mathausen”. El president agradeció al alcalde de El Vilosell, Joan Nogué, el acto de ayer, con el que se sintió emocionado, porque “es un gesto de reparación y de memoria histórica real”. En la jornada, en la que participaron decenas de vecinos, también se destacó el trabajo llevado a cabo por dos vecinos del municipio, Cristina Llorens y Marta Guillén, para poner en marcha la nueva biblioteca del municipio, que se estrenó en la Diada de Sant Jordi del año pasado. La jornada también contó con la presencia de otros hijos de deportados a campos nazis. “Mi padre no quería ser considerado un héroe, ya que en el campo sin el colectivo no podría haber sobrevivido”, destacó Llibert Tarragó. Un emotivo minuto de silencio y una ofrenda floral recordaron a todos los deportados a los campos de concentración, mientras que la cantante y vicepresidenta de Amical Mauthausen, Marina Rosell, interpretó la pieza L’Emigrant.
Un “espacio de memoria” con centenares de volúmenes La biblioteca de El Vilosell es una joya cultural en una población que apenas llega a los 200 habitantes y ya cuenta con centenares de volúmenes. Ahora también será un “espacio de memoria” para rendir homenaje a Joan Tarragó, que luchó en la Guerra Civil y se exilió a Francia, donde combatió con el ejército francés en la Segunda Guerra Mundial. En el campo de Mauthausen, creó una red de resistencia con otros presos antifascistas.