Vecinos de Almacelles apadrinan 411 tejas para reparar la iglesia local

Sufragar una obra a ‘tocateja’ ha adquirido en Almacelles un nuevo sentido. La parroquia de la Mare de Déu de la Mercè ha logrado que se apadrinen en mes y medio 411 tejas de la iglesia, lo que significa una aportación de 8.220 euros dentro de la campaña de micromecenazgo para la reparación de urgencia en el tejado. El templo precisa de una actuación en la cubierta para frenar su deformación, la degradación del envigado y la aparición de goteras por lo que a finales de abril puso en marcha una iniciativa para que los vecinos puedan aportar la cantidad que crean pertinente para el arreglo. Así, por cada 20€ de donativo se puede “apadrinar una teja” y los nombres de los beneficiarios aparecerán en cada una de ellas (ver SEGRE del 5 de mayo).

En estos momentos, hay un total de 391 padrinos de las más de 400 tejas. Según el rector de la iglesia, Joaquim Blas, las obras están a la espera de la licencia municipal. El proyecto ejecutivo ya está visado por el Colegio de Arquitectos y ya se ha entregado a los técnicos del ayuntamiento. La intención es que las obras comiencen a finales de verano, como muy tarde, indicó el mosén. La intervención en el templo supondrá una inversión de 242.553 euros, según el proyecto del obispado de Lleida que fue presentado a los vecinos en una charla informativa. La intervención se hará en tres fases de unos 70.000 cada una. Los trabajos comenzarán por la parte posterior y comportarán retirar todas las tejas, que se conservarán y repararán ya que son muy antiguas (el templo data del siglo XVIII), la reconstrucción del techo donde habrá que reforzar, restituir y consolidar toda la estructura de madera que lo soporta, y volver a colocar las tejas. Por su parte, el alcalde de Almacelles, Josep Ibarz, indicó que el ayuntamiento está dispuesto a sufragar las obras dentro del presupuesto del próximo año ya que para el actual ya se han acabado los fondos destinados a la reparación y protección de elementos arquitectónicos y edificios del centro histórico, como es el caso de la iglesia de la población. Cabe recordar que pese a la profunda degradación del techo no hay riesgo de desplome, por lo que la iglesia no está cerrada al culto.

Grietas y deformidad aunque no hay riesgo de que se desplome La humedad ha provocado la deformación del techo del templo y la aparición de grietas aunque, según los técnicos, no hay riesgo de desplome pero sí la necesidad de abordar cuanto antes una actuación de urgencia con la que frenar la degradación y la aparición de nuevas brecas. Según el alcalde, en 2015 y 2016 ya se hicieron actuaciones de urgencia para retirar los excrementos de las aves y limpiar las paredes de humedades.