Soriguera exige estabilizar el acceso a Les Llagunes contra desprendimientos

El acceso al núcleo de Les Llagunes en el municipio de Soriguera requiere una actuación de urgencia para evitar desprendimientos de grandes rocas que pueden llegar a cortar el acceso a este núcleo de población. Así lo describió ayer el alcalde, Josep Ramon Fondevilla, que aseguró la necesidad de estabilizar el talud que hay entre la carretera de acceso con el cruce con el barranco de Coma Sarrera. “Cada año caen piedras de distintos tamaños pero ahora la montaña está muy fracturada y se pueden desprender rocas de gran tamaño”, dijo. Esta semana geólogos han advertido de la gravedad del estado de la ladera y del riesgo de desprendimiento en esta zona de alta montaña. En este sentido, la empresa pública Infraestructures.cat ha adjudicado por 40.080 euros la redacción del proyecto para la mejora del acceso y la estabilización de la ladera. Sin embargo, aunque el proyecto pueda estar listo este mismo año, los trabajos, a priori, no podrán ejecutarse y el consistorio pide celeridad en su redacción para evitar males mayores en la zona. “Hace tres años se desprendió una gran roca que afortunadamente cayó por el barranco sin causar daños materiales pero su tamaño era como el de una casa”, dijo. Según Fondevilla los geólogos han advertido que el interior de la montaña está muy fracturado y cualquier dilatación puede provocar la rotura y desprendimiento.

En Mencui también se detectó riesgo de aludes tras un episodio de lluvias Hace un año en Mencui, otro de los núcleos de Soriguera, también se detectó un gran riesgo de aludes en el pubelo y los geólogos del Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya (ICGC) adviertieron de posibles desprendimientos de tierra si se mantenían los episodios de lluvias abundantes. El consistorio pidió asistencia técnica tras varios episodios de desprendimientos en la población y la aparición de grietas de hasta tres centímetros en una calle y en una casa del pueblo. El informe determinó que la principal causa de la inestabilidad del terreno sería la presencia de gran cantidad de agua que circula por la zona. Protección Civil informó que el año pasado desde abril a agosto se registraron en Catalunya hasta 223 desprendimientos de rocas.