URBANISMO COMISIÓN DEL ALT PIRINEU
Eliminan el resort de Vallfosca y planes para más de 4.000 casas en el Pirineo
La nueva planificación de la Generalitat recorta urbanizaciones sin desarrollar
La Generalitat quiere reducir a un solo hotel el gran proyecto del resort de Vallfosca, que incluía casi mil viviendas destinadas a segundas residencias. El suelo que debía acogerlas volverá a ser rústico, según el plan que prevé eliminar también proyectos para más de 4.000 casas y pisos en el Pirineo y recorta sectores urbanizables sin desarrollar.
Los terrenos junto al pueblo de Espui que debían acoger el gran resort de vacaciones de Vallfosca volverán a ser suelo rústico, y la superficie donde estaban previstas casi un millar de viviendas destinadas a segundas residencias solo podrán acoger un pequeño hotel. Así lo prevé el plan de la Generalitat para suprimir sectores urbanizables que nunca se han desarrollado y que califica como “no sostenibles”. El documento, que recibió ayer la aprobación inicial de la comisión de Urbanismo del Alt Pirineu, plantea eliminar también decenas de urbanizaciones planificadas que suman más de cuatro mil viviendas en las comarcas de montaña. Las considera inviables, ya sea desde el punto de vista económico o por incumplir normas sobre inundabilidad o construcción en pendiente.
La supresión de Vallfosca llega cuando la administración concursal de Martinsa Fadesa trata de vender el suelo urbanizable en subasta. El plan de la Generalitat propone también extinguir planes para decenas de viviendas en Alt Àneu. Entre ellas destaca una urbanización vinculada a Baqueira en Isil, en un momento en que la estación inicia las obras de su nueva expansión en el Pallars. En cambio, la planificación del Govern mantiene las 380 viviendas previstas junto al núcleo de Sorpe.
La supresión de casas se plantea mientras subastan el suelo de Espui y Baqueira hace obras en Alt Àneu
En Rialp, la eliminación de suelo edificable abarca casi dos mil viviendas. A los 58 sectores donde el plan propone suprimir 4.706 casas, se suman otros 56 que admiten 6.120 viviendas y que se revisarán a la baja. Esta planificación se someterá a un periodo de información pública y alcaldes avanzaron que alegarán. Mientras dure el trámite, seguirá en pie la moratoria que impide dar licencias de obras en sectores donde se plantea la supresión o la revisión. En cambio, esta restricción se alzará en los 46 sectores que se mantendrán y que suman 6.275 casas.
Alcaldes de municipios afectados por el plan de la Generalitat avanzaron que presentarán alegaciones, al considerar “excesiva” la supresión de suelo urbanizable. Este es el caso de Josep Maria Dalmau (ERC), primer edil de La Torre de Capdella. Apuntó que el consistorio es “aún es partidario del proyecto de Vallfosca” y defendió dejar la puerta abierta a que otro promotor pueda retomar en un futuro las pistas y el campo de golf inacabados, así como construir casas y hoteles.
El alcalde de Alt Àneu, el independiente Xavier Llena, defendió que los sectores suprimidos tienen una baja edificabilidad y permiten el crecimiento futuro del municipio mientras Baqueira relanza su expansión en el Pallars. “Parece que quieran convertirnos en una reserva”, dijo, y calificó de “agravio comparativo” que el plan no incluya a Aran.
El alcalde de Rialp y presidente del consell del Sobirà, Gerard Sabarich (JxCat), se mostró disconforme con suprimir sectores en lugar de buscar fórmulas “que permitan crecer” para frenar la despoblación. Avanzó que planteará a los municipios afectados formular una respuesta conjunta a nivel comarcal.
VIVIENDAS 4.706 eliminadas Distribuidas en 58 sectores que pasarán de terrenos urbanizables a suelo rústico. 6.120 en áreas que cambiarán Pertenecen a 56 sectores que se recortarán parcialmente o donde cambiará el uso del suelo. 6.275 se mantienen Forman parte de 46 sectores que, tras el primer examen de Urbanismo, seguirán vigentes.