El riesgo de desplome obliga a apuntalar una casa de Preixana

El ayuntamiento de Preixana se ha visto obligado a apuntalar los restos de una antigua casa que se derrumbó parcialmente a principios del pasado mes de julio. Tras sanear lo que quedaba de la estructura, el consistorio detectó que peligraba la casa contigua y la calle ubicada en la parte superior, por lo que los técnicos municipales recomendaron construir un muro de contención, que levantaron con piedras de la zona reforzadas con cemento. El alcalde, Jaume Pané, explicó que las tareas de saneado pusieron al descubierto un arco de piedra y un cup, que antiguamente se utilizaba para guardar grano, dos estructuras que el ayuntamiento ya ha documentado. Pané dijo que “la casa afectada se encuentra en el núcleo histórico”. El hundimiento de la casa, situada en el número 6 de la calle Lleida, se produjo el pasado 9 de julio sin causar heridos, ya que aunque en el momento de los hechos los dos inquilinos se encontraban en el interior de la vivienda, escucharon un ruido extraño y rápidamente salieron a la calle. La casa, de momento, no puede ser habitada de nuevo.