Los afectados por el incendio de junio mantienen el corte de la C-12 en Flix este domingo

Los ochenta agricultores leridanos afectados por el incendio de la Ribera d'Ebre, que han protagonizado este miércoles una marcha lenta por la autovía A-2, han anunciado un nuevo corte en la carretera C-12 a la altura de Flix para el próximo domingo, después de que ni la consellera Teresa Jordà ni ningún director general los recibiera en la Conselleria. Para acabar la concentración y en señal de indignación, algunos de los agricultores han colocado un olivo delante de la puerta del departamento. Además, durante la marcha también se han escuchado proclamas pidiendo la dimisión de la consellera por parte de algunos de los agricultores afectados por el incendio, que han considerado insuficientes las medidas de apoyo aprobadas por la conselleria y han pedido que se los concedan ayudas directas a fondo perdido.

El del domingo será ya el cuarto corte de la carretera C-12 después de los incendios de junio. El presidente del sindicato de agricultores Asaja Lleida, Pere Roqué, que ha actuado de portavoz de los asistentes ha explicado además que seguirán con los cortes "hasta que la gente perciba las ayudas que prometieron". Además, Roqué también ha animado a todo al colectivo de agricultores a sumarse a la protesta. "Estamos muy desilusionados y fastidiados y por eso invitamos no sólo a los afectados por los incendios sino a todo al campesinado en general para que se vea que realmente la población rural estamos cansados de que se nos engañe", ha manifestado.

Roqué ha pedido que se conceda a los agricultores afectados ayudas directas y ha considerado "no apropiados" los créditos blandos aprobados hace 15 días por parte de la conselleria. "Hemos venido aquí para decir a la consellera que no vamos en su contra, sino que queremos darle apoyo para que el gobierno se dé cuenta de que tiene que haber ayudas directas sí o sí antes de que se acabe el mes", ha explicado Roqué, que también ha protestado por el hecho de que todas las ayudas directas vayan destinadas a la limpieza de bosques.

También ha participado en la marcha Òscar Acero, el alcalde del municipio de Bovera, uno de los más afectados por el incendio, que ha calificado el ambiente entre los agricultores del municipio como "muy crispado". "Tenemos muchas facturas pendientes del incendio y los proveedores quieren cobrar, el primer día nos dijeron que no nos preocupáramos que tendríamos ayudas directas y al cabo de dos meses vemos cómo no tenemos nada", ha explicado Acero. En el mismo sentido que Roqué, el alcalde del municipio de Les Garrigues ha calificado de "absurdos" los créditos aprobados por el gobierno por la imposibilidad de devolverlos si no hay producción por culpa del incendio.