El desprendimiento de Andorra se produjo por trabajos en el terreno

El desprendimiento que el 10 de agosto obligó a cortar durante seis horas el acceso a Andorra desde Cataluña no se habría producido por causas naturales, según apuntan los primeros informes geológicos sobre los cuales ha informado al ejecutivo del Principado este lunes. De esta manera, se investiga la relación que hay entre el desprendimiento, que afectó a un tramo de la carretera CG-1 a la altura de la Borda Sabaté, y la actuación que en los últimos años se estaba llevando a cabo en la parcela donde tuvo lugar, situada justo delante del centro comercial Punt de Trobada. En paralelo a estos estudios, el gobierno andorrano está elaborando el pliego de bases que permitirá sacar a licitación los trabajos de acondicionamiento definitivos que se han previsto para garantizar la seguridad del tráfico en esta zona.

Aunque todavía no se ha hecho un cálculo exhaustivo del coste que se deriva del desprendimiento, este se situaría en la franja de los centenares de miles de euros, según ha informado el gobierno de Andorra este lunes. En este importe, el ejecutivo del Principado incluiría la actuación provisional que se llevó a cabo en la zona afectada, como el levantamiento de un muro de contención, y la movilización de efectivos de emergencia, ya sea para analizar la estabilidad de la montaña o regular el tránsito rodado en este punto, entre otros.

Tanto los informes como los gastos derivados para normalizar la situación después del desprendimiento se están poniendo en conocimiento del gabinete jurídico del gobierno andorrano, a fin de que este organismo determine si se tienen que aplicar acciones posteriores relacionadas con este incidente.