El vivero de empresas de Cervera acoge una escuela de buceo con 36 alumnos

Cervera ha estrenado este año una escuela de submarinismo que cuenta con 36 alumnos. Con sede en el vivero de empresas, tiene estudiantes de esta ciudad y también de Lleida, Tàrrega, Mollerussa e incluso de Igualada. El curso que ofrecen consta de clases teóricas y sesiones prácticas en la piscina cubierta de la capital de la Segarra y luego en el mar.

Cervera le ha sacado partido a su leyenda del puerto de mar. El pasado mes de mayo, David Mendoza abrió en la capital de la Segarra la escuela Subaquàtic Cervera. “Me llamaron friqui y fui objeto de todo tipo de comentarios de broma”, recuerda Mendoza. Sin embargo, su proyecto ha conseguido un buen número de participantes de Cervera, Tàrrega, Mollerusa, Lleida ciudad e incluso de Igualada o Abrera. El centro,

con sede en el Centro de Empresas Innovadoras (CEI) del municipio, ha conseguido 36 alumnos en tres meses. “He superado los 30 que me había propuesto lograr el primer año”, recalcó Mendoza.

Los alumnos que participan en el curso reciben el certificado internacional de buceo ‘Open Water’

El curso se lleva a cabo durante una semana y combina clases teóricas y prácticas. Estas sesiones tienen lugar primero en la piscina cubierta de Cervera y luego en el mar. A partir de ahí, los miembros pasan a formar parte del club y organizan salidas semanales a diferentes puntos de la costa donde combinan el ocio con el entrenamiento.

El curso que se imparte en la capital de la Segarra sirve para conseguir el certificado internacional de buceo Open Water, y luego las prácticas permiten conseguir especializaciones diversas como buceo nocturno, buceo en embarcaciones hundidas, nítrox, entre otras, que permiten que el buceador pueda llegar a ser autónomo.

Mendoza abrió su escuela de submarinismo en Cervera tras descartar ponerla en marcha en Bali. “Mi mujer me dijo que si me iba a Bali ya podía quedarme allí”, apuntó. En lugar de renunciar a su proyecto, decidió “probarlo en casa”. Planteó la idea a la Paeria de Cervera, donde el técnico municipal Arseni López “puso todo tipo de facilidades”, dijo, y acabó instalándose en el CEI.

La Paeria de Cervera ofrece ayudas a los emprendedores que abran un comercio o industria, financiando el 50% del coste del alquiler del local durante los seis primeros meses. Según el alcalde, Ramon Augé (JxCat), el objetivo es incentivar la actividad económica.

Otras localidades leridanas como Almenar también ofrecieron este verano un curso de iniciación al buceo, donde los participantes pudieron aprender nociones básicas sobre este deporte. En total, unas 100 personas asistieron al curso, que se celebró durante este mes de julio, según explicó la alcaldesa, Teresa Malla. En Lleida ciudad, una escuela de submarinismo imparte clases desde hace años, mientras que esta actividad forma parte de las actividades deportivas que se pueden practicar en el Pallars.