La falta de portadores amenaza a las 'Colles Geganteres' de muchos pueblos de Lleida

El ayuntamiento de Térmens ha hecho un llamamiento a los vecinos del pueblo para encontrar portadores para los cuatro gegants del municipio el día grande de las fiestas, el próximo día 12 de septiembre ante la falta de personal. Ponts ha hecho lo mismo para sacar a los cap-grossos y requiere a jóvenes voluntarios mayores de 10 años para que sean los que lleven a estas figuras de papel-cartón. Esta problemática la viven muchas de las colles geganteres de las comarcas de Lleida, especialmente durante la primavera y verano, según explicó el director de la Coordinadora de Geganters i Grallers de les Comarques de les Terres de Lleida, Enric Figueres. “Las colles funcionan pero cuesta mucho sacar las figuras por falta de personal. Es el trabajo más duro y menos visible de un grupo, que también se compone de músicos que tocan las gralla y varios acompañantes”, dijo. Aseguró que la falta de portadores es el grave problema del mundo geganter en la actualidad, principalmente por la temporalidad de los encuentros y pasacalles. “Todos tienen sus trabajos y sacar una figura require de tiempo y disponiblidad”. La situación se repite en los grupos más pequeños o de pueblos porque en las colles más grandes o de ciudades es el ayuntamiento el que paga a personas que portan las figuras, según confirmaron ayer fuentes de la concejalía de Cultura de la Paeria de Lleida. Aseguraron que se paga a semiprofesionales para que hagan estas tareas de sacar a las figuras y que es algo habitual. Según Figueres es un problema generacional cuya solución pasaría por incentivar este tipo de cultura popular a través de las escuelas. Algunos de los grupos no han podido sacar a todos los gegants o han suspendido la salida por falta de personal, tal y como reconocen los caps de colla del Montoliu de Lleida o de Miralcamp, Anabel Cerezo y Àlex Miret. En la mayoría de los casos cada gegant requiere a dos portadores para relevarse en los encuentros populares. Esta carencia de profesionales ha provocado la creación de un grupo de voluntarios que se desplaza por los pueblos para sacar a los gegants y poder disfrutar de la fiesta popular. “Gente voluntaria que se ofrece en días puntuales y festivos y dispuesta a movilizarse por distintos pueblos de Lleida”, explicó Anna de Montoliu. Un total de 32 colles forman parte de la Coordinadora de Geganters i Grallers de les Comarques de les Terres de Lleida y entre ellas se ayudan si hace falta o requieren de portadores, explicó Cerezo. El cap de colla de la Fal·lera Gegantera de Tàrrega, Robert Tavira, reconoció que “cada vez hay menos portadores” si bien aseguró que “siempre acabamos encontrando alguien para sacar las figuras”. En Tàrrega no ha sido necesario contratar personas pero sí de una colla de grallers que, según Tavira, “puede costar entre 100 y 120 euros”, dijo. Guissona hizo un llamamiento para encontrar portadore para este próximo fin de semana.

Talleres para aprender a llevar a las figuras Para que los gegants cobren vida es necesario que alguien les aporte el movimiento: estos son los portadores, miembros de les colles geganteres que son los encargados de hacerlos danzar o caminar. Los participantes de un grupo suele diluirse por diferentes motivos, incompatibilidad profesional o la edad. Con el objetivo de incentivar y mantener viva esta tradición, Enric Figueres apuntó la necesidad de organizar talleres para aprender a llevar a las figuras y vincular más a la ciudadanía para conseguir más dinamismo dentro de les colles geganteres de Lleida.