Tres nuevas condenas contra un exabogado por estafar a clientes

Pere Rubinat Forcada, un exabogado leridano, ha sido condenado nuevamente por apropiarse de dinero de clientes. Concretamente, el exletrado debe devolver más de 100.000 euros a un mismo afectado, vecino de Alcarràs. De esta forma, ha sido condenado en al menos seis ocasiones con penas que suman seis años y nueve meses de prisión e indemnizaciones de más de 360.000 euros. Cabe señalar que Forcada ingresó voluntariamente el pasado 19 de abril en la cárcel de Lledoners, en Sant Joan de Vilatorrada (Bages), como avanzó SEGRE. En estos nuevos casos se trata de dos sentencias del Juzgado de Instrucción número 2 de Lleida que estiman sendas demandas y condenan a Rubinat a pagar 61.416 euros y 33.414 euros, y una tercera sentencia del Juzgado de Instrucción número 5 en la que se determina que debe abonar al afectado otros 6.424 euros. En una de las resoluciones, el juez afirma que el exletrado tuvo una actuación “negligente”.

El estafado, en declaraciones a este periódico, afirmó que Forcada “era mi abogado y me representó durante años en temas laborales hasta que descubrí que me había engañado con sus continuas artimañas”. El denunciante añadió que “hay muchos casos que todavía no han salido a la luz”. El modus operandi del exabogado para apropiarse del dinero es similar en todos los casos, como se ha acreditado en el resto de condenas: pedía a los clientes dinero como provisión de fondos para hacer gestiones que no llegaba a efectuar o cobraba dinero para los clientes, a los que, con engaños, les decía que no había percibido. Por ejemplo, fue condenado a dos años y medio de cárcel por apropiarse de 101.812 euros de un matrimonio de Torregrossa que fue indemnizado por la muerte de su hijo en un accidente de tráfico en 2010. En el juicio aseguró que esta cantidad eran sus honorarios. En otro caso, se apropió de 124.529 euros de la indemnización que debían cobrar unos clientes por un accidente laboral mortal. Ocultó a los afectados que los hubiera percibido. También se ha visto favorecido por la ley. Un juzgado de lo Penal le condenó a tres años pero fue absuelto posteriormente porque los hechos habían prescrito.