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La quiebra de Thomas Cook tiene un impacto "muy importante" en sus vuelos de Alguaire, según Neilson

Por el contrario, la Generalitat no prevé que el cierre de la compañía británica tenga una afectación "masiva"

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La continuidad de los vuelos de esquiadores británicos en el aeropuerto de Lleida-Alguaire cuelga de un hilo después de la quiebra de la compañía Thomas Cook. Y es que esta empresa británica aportaba un 70% de los aviones en el touroperador Neilson que es el que vende los paquetes turísticos para llevar esquiadores que mayoritariamente aterrizan en la plataforma leridana para después ir a esquiar a las pistas andorranas y en menor medida a Baqueira Beret.

Según el portavoz en Andorra de Neilson, Ian Archer, Thomas Cook tenía "una flota de aviones" adaptada a sus necesidades y que eso les obligará a buscar a otros proveedores. "No será fácil pero trabajaremos para conseguirlo", ha remarcado Archer, que también ha puntualizado que ahora la prioridad que tienen es solucionar las cancelaciones que afectan a los paquetes turísticos de final de temporada de verano y en las próximas semanas empezarán a trabajar para la temporada de invierno. Neilson no sólo lleva esquiadores a Lleida-Alguaire sino que también lo hace a Francia, Italia y Austria.

Por otra parte, Archer ha señalado que están manteniendo conversaciones con la Generalitat para informar de cómo evoluciona la situación. Precisamente el 1 de agosto se anunció la renovación del acuerdo del touroperador británico con el aeropuerto de Lleida-Alguaire para seguir llevando yendo esquiadores británicos al Pirineo la temporada de invierno 2019-2020. Con este acuerdo, la compañía se comprometía a ofrecer los servicios necesarios para la funcionalidad de la operativa de Neilson, incluyendo el acuerdo con el aeropuerto de Reus para días con la presencia de niebla intensa en Alguaire, a fin de que los pasajeros puedan llegar a la destinación final sea cuál sea el aeropuerto donde aterricen. La previsión de Neilson era poner en venta 10.000 paquetes turísticos que pasarían por Lleida-Alguaire para ir a las pistas de Andorra y también Baqueira Beret.

La Generalitat no prevé un impacto "masivo"

Por su parte, el secretario general de Infraestructuras y Movilidad del Govern de la Generalitat, Isidre Gavín, no prevé que el cierre de Thomas Cook tenga un impacto "masivo" en el aeropuerto de Lleida-Alguaire. "Confiamos en que se podrá operar y que el impacto sea menor", ha explicado. A pesar de admitir que "no hay demasiado tiempo" para buscar un operador alternativo antes de que empiece la temporada de invierno, ha opinado que Neilson tiene "margen" para encontrar otras empresas. Gavín ha argumentado que los británicos no son los proveedores exclusivos del aeropuerto y que es "más fácil" hacer cualquier operación en temporada baja.

Una amenaza para 22.000 puestos de trabajo por todo el mundo El operador de viajes británico Thomas Cook ha ido a la quiebra después del fracaso de las negociaciones para garantizar un rescate para la empresa, que tiene 178 años de historia. Con el cierre de Thomas Cook, centenares de miles de turistas se han quedado sin vuelos para volver a casa o sin las vacaciones que ya tenían planeadas, y ahora tendrán que ser repatriados con otras compañías o a través de vuelos chárter del gobierno británico. Además, hay también 22.000 trabajadores por todo el mundo que pueden perder el trabajo. Thomas Cook entra en liquidación después de que haya fracasado un rescate multimillonario que impulsaba uno de sus principales accionistas, Fosun, un fondo chino. Fosun había comprometido 900 millones de libras desde agosto pero en los últimos meses los bancos pedían 200 millones más por contingencias y Thomas Cook no los ha conseguido. Aparte, el gobierno británico ha descartado rescatar la compañía, que sobrevivió a dos guerras mundiales.

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