El calor y la falta de lluvias dejan sin pastos las vacas de Llessui
Los ganaderos las han sacado de la montaña antes de tiempo
Algunos ganaderos que tienen los animales en la montaña de Llessui, en el Pallars Sobirà, han tenido que adelantar la vuelta en casa de vacas y terneros por falta de comida en la montaña. Las olas de calor de este verano y la falta de lluvias han hecho que haya menos pasto que otras temporadas. Eso ha llevado a algunos ganaderos a tener que adelantar la bajada de los animales. Normalmente los ganaderos recogen el ganado el día 4 de octubre pero este año muchos han avanzado la vuelta hasta tres semanas. Agustí Escur, presidente de la montaña de Llessui, ha explicado que este imprevisto supondrá a los ganaderos un sobrecoste económico y de trabajo. Tener que alimentar a los animales estas semanas fuera de la montaña es un coste importante.
Las más de 1.100 vacas y terneros, 4.000 ovejas y 200 yeguas que pacen en estos prados en verano empiezan a tener problemas para encontrar comida. Escur reconoce que ya en el mes de junio, cuando subieron los animales a la montaña, ya no había la hierba que hay habitualmente. La meteorología de los meses de julio y agosto no ha acompañado para hacer crecer la hierba y ahora, la poca que pueda salir, ya no es buena para alimentar a tantos animales.
Los ganaderos recuerdan haber vivido una situación similar en 2012 cuando las zonas de alta montaña sufrieron los estragos de la sequía y también tuvieron que avanzar la retirada de los animales de la montaña, donde pasan cuatro meses.