ESNOTICIA
La protesta paraliza las carreteras
Las principales carreteras de las comarcas leridanas, como la A-2 en Tàrrega y Fondarella; la AP-2 a la altura de Tarrés; la N-240 en Les Borges y Margalef (Torregrossa); la N-II en Fondarella; la C-55 en Solsona; la Ll-11 en Lleida; la N-145 en La Seu d’Urgell o la N-230 en Alfarràs y El Pont de Suert quedaron cortadas desde primera hora de la mañana hasta el mediodía. Vecinos de estas poblaciones ocuparon las calzadas y cortaron la circulación de los vehículos en un ambiente reivindicativo. Aunque eran conscientes de que los cortes de vías podían provocar “algún caos”, estaban dispuestos a materializar su objetivo: hacer patente su rechazo a la sentencia del Tribunal Supremo contra los líderes independentistas. En el Urgell se organizaron desde primera hora y cortaron la A-2 en sentido Lleida durante 45 minutos con la quema de neumáticos y balas de paja. También se cortó la N-II durante 10 minutos y el tramo urbano de la C-14 en Tàrrega. En el Pla d’Urgell las acciones de protesta se iniciaron también en la A-2 donde 200 personas cortaron el tráfico a la altura de Fondarella, primero en sentido Barcelona, y posteriormente a Lleida durante más de dos horas. También cortaron la carretera N-II en Fondarella y en el tramo urbano de la capital del Pla aunque la circulación se abrió de forma intermitente. Las colas fueron largas y se abrieron corredores de emergencias. La mayoría de las vías quedaron abiertas al mediodía. En el Alt Urgell se cortó el acceso a Andorra (N-145) desde La Seu durante 12 horas. La N-230 quedó cortada en El Pont de Suert (Alta Ribagorça) y en Alfarràs (Segrià). El corte de Les Garrigues se centró en la N-240 en Les Borges y Margalef (Torregrossa), aunque el corte provocó retenciones en la carretera LV-702 en Puigverd de Lleida. Los manifestantes también cortaron a primera hora un carril de la AP-2 en Tarrés. En el Segrià los manifestantes se desplazaron a la C-45 en Seròs que estuvo cortada un par de horas y a la autovía A-2 en Alpicat, donde al mediodía hasta entrada la tarde se registró algún altercado con un camionero. El Centro Integral de Mercancías de Lleida (CIM) no se escapó de los manifestantes que bloquearon el acceso.