MUNICIPIOS REGULACIÓN
La Seu rebaja multas a los dueños de perros que no recojan los excrementos
En cambio, las subirá a los propietarios que no faciliten el ADN de sus animales
El pleno de La Seu aprobó anoche rebajar las multas que hasta ahora imponía a los dueños de perros por no recoger los excrementos de sus animales de la vía pública. Así, las infracciones graves se castigarán con sanciones de entre 250 y 600 euros, cuando antes eran de entre 300 y mil euros. Las muy graves, como dejar excrementos en espacios de juegos infantiles o en zonas donde están prohibidos los perros, recibirán multas de entre 600 y 1.750 euros, menos que los entre mil y dos mil euros que hasta ahora debían pagar los infractores.
En cuanto a las infracciones leves, las sanción mínima se mantendrá en 60 euros y la máxima se rebajará y pasará de 300 a 250. Mientras que el importe de las multas por dejar excrementos en la calle disminuye, aumentará en cambio el de las sanciones a dueños de mascotas que no faciliten al ayuntamiento el ADN de sus animales. Cabe recordar que La Seu fue pionera en establecer este sistema para analizar los excrementos abandonados en la calle, identificar al animal y sancionar a su propietario. Hasta ahora, no presentar al consistorio el perfil genético de una mascota se castigaba con multas de hasta 300 euros. Ahora podrán ascender hasta los 600 euros.
El vicealcalde, Francesc Viaplana (ERC), defendió el reajuste para facilitar el cobro de las multas, ya que hasta ahora se encontraban con que muchos propietarios de perros se acababan declarando insolventes para no pagarlas. En cuanto a los que no han aportado el ADN de sus mascotas, Viaplana señaló que “un porcentaje importante de propietarios” aún no lo ha hecho y recordó la “extensa campaña del consistorio antes de sancionar”. Hasta ahora el consistorio ha analizado 35 muestras de heces, lo que ha permitido abrir 20 expedientes sancionadores.