Condenados a devolver 304.242 € por casas que no se hicieron en Almacelles

El Tribunal Supremo ha condenado al BBVA y al Banco Sabadell a retornar 304.242 euros a seis familias que avanzaron esta cantidad en total por la compra de seis casas adosadas en Almacelles que nunca se llegaron a construir. Las familias afectadas avanzaron diferentes cantidades a la promotora, Habitatges Roure-Arnó, entre los años 2005 y 2006 como anticipo para la construcción de las adosadas en un solar entre las calles Àngel Guimerà y la carretera de Sucs. Sin embargo, la constructora hizo un concurso voluntario de acreedores.

Las familias afectadas, representadas por el letrado Enric Rubio, del despacho Rubio Advocats, iniciaron una batalla judicial contra Caixa Penedès (luego Banco Sabadell) y Caixa Catalunya (luego BBVA), las entidades que estaban detrás de la operación, al considerar que no exigieron a la promotora-constructora un aval o un seguro que garantizara el retorno del dinero en el caso de no poder entregarse las viviendas. El juzgado de Primera Instancia 4 de Lleida desestimó la demanda en 2015 y, posteriormente, la Audiencia de Lleida solo la estimó parcialmente. Las familias recurrieron ante la Sala Civil del Tribunal Supremo, que ahora les ha dado la razón. El Supremo considera que los dos bancos “conocían o debían conocer que en la cuenta del promotor se estaban haciendo ingresos de los afectados para comprar las casas, ya que era la misma en la que se pagaba el préstamo hipotecario concedido para la promoción de viviendas”. De esta forma, el alto tribunal concluye que “procede estimar la responsabilidad por la restitución de todas las cantidades que los compradores ingresaron”. El Banco Sabadell debe retornar 152.698,12 euros y el BBVA, 151.544 euros.