EDUCACIÓN INFANTIL Y PRIMARIA
Microescuelas rurales
Un total de 28 colegios de Lleida tienen entre 6 y 15 alumnos, cuando el mínimo necesario es 5 || Conselleria y maestros destacan su gran nivel educativo al dar una atención individualizada
Casi el 14% de las 204 escuelas de las comarcas de Lleida tienen un máximo de quince alumnos. Son un total de 28, y parte de ellas no tienen asegurado el futuro a medio plazo, ya que necesitan un mínimo de 5 niños para seguir abiertas. Educación y los maestros destacan que la atención individual que ofrecen hace que tengan un gran nivel educativo.
La provincia de Lleida cuenta con 28 escuelas que tienen un máximo de 15 alumnos, lo que supone casi el 14% de las 204 existentes. Según los datos del departamento de Educación, hay once que tienen 10 o menos niños (ver cuadro inferior), por lo que su futuro a medio plazo no está garantizado, ya que es necesario un mínimo de cinco para mantenerlas abiertas.
Los 28 colegios están repartidos entre las comarcas del Urgell, Noguera (seis en cada una), Segrià (5), Alt Urgell (3), Cerdanya (3), Les Garrigues (2), Pallars Sobirà (2) y uno en la Val d’Aran. El delegado de Educación, Carles Vega, recordó que
Casi un 14% de las 204 escuelas de Infantil y Primaria de Lleida tienen menos de 16 niños
se integran en las denominadas Zonas Escolares Rurales (ZER), que agrupan a escuelas con pocos alumnos. Señaló que aparte de un mínimo de un maestro (pueden tener más si hay más de una unidad), comparten con la ZER los docentes itinerantes especialistas de inglés, música y educación física, a los que puede sumarse, si la dirección de la ZER lo ve necesario, otro de educación especial. Sobre los medios de que disponen, consideró que “están bastante bien equipadas”. Admitió que puede haber alguna que tenga ordenadores un tanto obsoletos, pero apuntó que están renovando equipos y que, en general, incluso en municipios donde no hay banda ancha disponen de una velocidad de internet “bastante buena”, ya sea por radio o cable. Vega alabó especialmente su nivel educativo. Indicó que, al haber pocos alumnos, la atención es muy individualizada, y que el hecho de que niños de diferentes cursos compartan la misma aula hace que haya una interacción entre ellos que ayuda a reforzar sus conocimientos.
Esta es una apreciación con la que coinciden plenamente los maestros de estas escuelas. Òscar Montáñez, director de la de Els Omells de Na Gaia, que tiene 6 alumnos, explica que son de cinco cursos (P-3 y segundo, tercero, cuarto y quinto de Primaria) y que “se ayudan mucho y aprenden entre ellos”. A la vez, destaca la atención “muy personalizada”. “La principal ventaja que tenemos es un trabajo muy individualizado”, corrobora su homóloga del colegio de Tírvia, también con 6 alumnos, Gemma Castilló. El de Peramola, con 14 niños, es algo mayor. Su directora, Núria Roca, también considera que el aprendizaje es mejor. “Les damos una atención individualizada y podemos captar sus necesidades y reaccionar al momento”, dice. “La motivación que tiene un pequeño cuando la lección se la explica otro compañero de más edad es mayor”, añade.
Ahora bien, también hay desventajas. Castilló señala que “a nivel de socialización nos quedamos un poco cojos, por eso organizamos actividades conjuntas de la ZER”. En el caso de la escuela de Els Omells de Na Gaia, todo apunta a su cierre a medio plazo, porque dentro de dos cursos habrá 5 alumnos y dentro de tres, solo tres, a menos que vengan familias de fuera. Por su parte, Roca indica que al ser centros pequeños, los recursos de las Ampas para comprar material son reducidos.
“Somos una gran familia, estamos muy unidos ” En estas escuelas, los docentes ejercen varias funciones a la vez. “Asumes la dirección, la gestión económica, la coordinación y las clases”, explica Òscar Montáñez, maestro de la de Els Omells de Na Gaia. “Es todo un reto, porque haces de secretaria, de jefe de estudios, de directora...” dice Gemma Castilló, maestra en Tírvia. Eso sí, Montáñez subraya que “somos como una gran familia, estamos muy unidos”, y detalla que celebran fiestas con las familias. La directora de la de Peramola también destaca la ayuda del ayuntamiento.