MEDIO AMBIENTE GESTIÓN
Prioridad: invertir en el paisaje
El abandono del medio rural, el crecimiento de las masas forestales y el calentamiento global favorecen incendios devastadores que pueden prevenirse con más inversión en el territorio || El jefe de los GRAF, Marc Castellnou, apuesta por la bioeconomía como herramienta de gestión
La mejor prevención para evitar un incendio forestal es creer e invertir en el territorio, y este no es solo un tema de gobiernos y administraciones, es un tema que nos afecta a cada uno de nosotros”. Así de contundente se mostró Marc Castellnou, jefe del Grup d’Actuacions Forestals (GRAF) de los Bombers de Catalunya. En una jornada sobre incendios forestales el viernes, alertó que la única manera de prevenir incendios devastadores ante la extremada exposición al cambio climático es hacer una buena gestión del territorio, donde el sector primario tiene un papel “trascendental”. Según Castellnou, de la misma manera que invertimos en comprar una vivienda, como sociedad debemos tomar decisiones sobre cuál es el paisaje que queremos. “Es evidente que los que gobiernan deben desplegar políticas que permitan vivir en el territorio pero nosotros como individuos tenemos la capacidad de influir en el paisaje”, dijo. La inversión debe ser transversal, contando con el payés y el propietario forestal, crear una economía de país sin depender de las subvenciones que permita construir un paisaje resistente para sobrevivir a los desafíos del cambio climático. Para el jefe de los GRAF el trabajo diario de los agricultores y del sector primario en las zonas rurales con masas forestales es equivalente a una inversión en seguridad y protección. “Si eliminamos la protección y sumamos el abandono del medio rural, y las tremendas sequías causadas por el calentamiento global sabemos que llegan los incendios devastadores”. Insistió en la necesidad de mejorar el modelo de consumo y crear bioeconomía: si consumiéramos más carne de proximidad, o compráramos muebles construidos con maderas de nuestra zona, ayudaríamos a preservar los bosques. “Hay que ayudar al ecosistema a que cambie”, subrayó. Debemos entender cómo funcionan las masas forestales con el cambio climático y es preciso promover una bioeconomía que explote sus recursos.
Para Marc Castellnou, el trabajo que está llevando a cabo el municipio de La Baronia de Rialb respecto a la gestión forestal y el aprovechamiento de la masa forestal es un ejemplo de gestión (ver desglose). “Es una inversión en el territorio y por tanto, una prevención de incendios, logran adaptar el paisaje a las condiciones climáticas”. Aseguró que los trabajos que se llevan a cabo, son actuaciones de mejora, sobre todo para abrir espacios en los bosques para mejorar su vitalidad, reducir el riesgo de incendios y hacerlos más resistentes ante las sequías o plagas forestales. La gestión de la madera es un recurso que tiene una repercusión importante en territorios rurales con problemas de abandono y una elevada necesidad de generar actividad compatible con los valores ambientales.
El despliegue del ‘district heating’ La red de calefacción urbana con una sola caldera de biomasa que se ha instalado en Vilaplana, en la Baronia de Rialb, se inicia en la isla de 33 metros cuadrados donde está ubicada la caldera y el silo que se almacena la biomasa. Desde allí se va extendiendo la red principal por el centro por la calle con las respectivas conexiones en cada una de las ocho viviendas. Cada innueble tiene un contador propio conectado a la red de calor.