Plantean cuidar las riberas para seguir cultivándolas

Payeses de Ivars de Noguera y el departamento de Agricultura estudian una solución legal que permita cultivar las fincas de ribera de los ríos Noguera Ribagorçana y Segre, propiedad de la Generalitat, ante el rechazo de los agricultores a pagar el canon anual por trabajar estas tierras, que en algunos casos ha subido hasta un 500%. Una propuesta sobre la mesa es que los payeses hagan trabajos de mantenimiento en las riberas y su entorno para seguir cultivando.

El incremento es consecuencia del proceso de regularización catastral que inició la conselleria en 2018 y que los afectados, cerca de 200 entre la Noguera y el Segrià, ven desproporcionado e injusto. Precisamente, una representación de una treintena de payeses de Ivars de Noguera entregaron ayer una carta de rechazo al delegado de Agricultura en Lleida, Ferran de Noguera, en la que instan a reconsiderar esta subida. Por su parte, De Noguera explicó que ambas partes se volverán a reunir en enero para valorar propuestas que permitan la gestión de las fincas de una manera “satisfactoria para ambas partes”. Aseguró que el objetivo es evitar un concurso público para la explotación de estos terrenos. Por su parte, los agricultores reconocieron la “voluntad” de Agricultura de encontrar una solución. El canon se remonta a los años 60 y, a partir de este año, los agricultores pasan de pagar una media de 52 euros anuales a 284. Los afectados no liquidarán el recibo de 2018.