Agricultores de Lleida, Aragón, Navarra y La Rioja exigen un “plan de subsistencia” rural

Agricultores y ganaderos de Lleida y de las comunidades de Aragón, Navarra y La Rioja reclamaron ayer en Zaragoza un “plan de subsistencia para el mundo rural” con medidas que van desde la retirada de todos los osos del Pirineo hasta créditos sin interés para paliar los perjuicios económicos que ocasiona el hundimiento de los precios de la fruta dulce (ver claves). Representantes de la organización agraria Asaja de estos territorios criticaron lo que consideran “ausencia de políticas agrarias” tanto por parte del Gobierno en funciones como de la Unión Europea (UE) para evitar la progresiva despoblación de las zonas rurales.

“Más de 70.000 empleos directos están en juego entre las cuatro comunidades”, lamentó el presidente de la organización en Lleida, Pere Roqué, quien indicó como ejemplo que “nadie está haciendo nada ante el retroceso de la ganadería extensiva en las comarcas de montaña”. Mientras el Conselh de Aran plantea la posibilidad de expulsar a dos ejemplares considerados conflictivos, Goiat y Cachou, esta entidad y sindicatos agrarios recalaman retirar la totalidad de los plantígrados del Pirineo, alrededor de 50 ejemplares que ahora hibernan.

“No puede ser que cada verano estemos discutiendo sobre cuáles son los daños que deben indemnizarse y cuáles no”, añadió Roqué, quien apuntó que el ganado despeñado al huir o asfixiado al apiñarse durante ataques del oso no se indemnizan. A esto se suman predaciones de lobos en la comarca del Solsonès a lo largo del último año.

En cuanto a la fruta, señaló que establecer líneas de crédito sin interés para disponer de circulante es “necesario para poder iniciar la próxima campaña” tras las pérdidas registradas en la última. Insistió en pedir un plan estatal de arranque de árboles y señaló que los precios han llegado a caer hasta 18 céntimos por kilo de fruta, frente a costes de producción de entre 30 y 35. Esto arroja pérdidas de hasta 17 céntimos por kilo. A las quejas de esta entidad, se suman las protestas por incidencias en servicios básicos y telecomunicaciones.