Guissona pide más recursos y ayudas al superar el 52% de inmigración

Guissona ha conseguido este mes de enero su máximo histórico, tanto de población, con 7.290 vecinos, como de personas extranjeras, alcanzando las 3.810, lo que supone el 52,2% del total de los vecinos. Hasta ahora había llegado al 50% y este récord consolida al municipio como uno de los que tiene más población inmigrante de España. El alcalde, Jaume Ars, explicó que “es preocupante porque los servicios públicos, como la sanidad o la enseñanza, están colapsados, pero además el consistorio no tiene recursos humanos y técnicos para asumir la situación”. Solo dispone de una técnica de acogida a media jornada.

Para Ars, el volumen de personas que llega a Guissona necesita una mayor atención a nivel inmediato, con más personal de acogida, y a medio plazo “para conseguir una mayor integración y evitar que se produzcan guetos”. En este sentido, explicó que a corto plazo el problema no es la convivencia, “la gente tiene trabajo y convive de forma armónica”. Sin embargo, reivindicó financiación pública para contratar un mediador cultural que pueda planificar una mejor integración de la población extranjera. El equipo de gobierno se reunió ayer con el subdelegado del Gobierno en Lleida, José Crespín, para pedir financiación económica para poder ofrecer un mejor servicio de atención e integración.

Según las previsiones de BonÀrea, Guissona seguirá aumentando hasta llegar en los próximos 3 años a los 10.000 habitantes, superando a la capital de la comarca, Cervera. La nacionalidad mayoritaria es la rumana con 1.297 habitantes, seguida de Ucrania con 1.061, Senegal con 517 y Bulgaria con 293. En Guissona conviven 49 nacionalidades. Los nuevos vecinos son mayoritariamente población joven, entre 20 y 35 años.