MUNICIPIOS TOLERANCIA
Tàrrega buscará la participación de vecinos para mejorar la convivencia
En la plaza de les Nacions, donde el ayuntamiento ha constatado conflictos
Preocupación entre los vecinos de la plaza de les Nacions.
El ayuntamiento de Tàrrega y la Fundació Jaume Bofill impulsan un novedoso proceso de participación ciudadana con el objetivo de mejorar la convivencia en la plaza de les Nacions, donde el consistorio ha constatado conflictos. Así lo reconoció el concejal de Ciudadanía, Xavier Rossell. En declaraciones a Ràdio Tàrrega afirmó que en este espacio público “hay algún problema de convivencia: A nivel de guardia urbana se está interviniendo; a nivel de vecinos hay preocupación; hay personas, sobre todo mujeres, a les que les da miedo pasar por allí; hay un tema de consumo y tenencia de drogas” (ver desglose).
El proceso participativo, denominado EDhack, tendrá lugar durante el mes de noviembre y consistirá en un encuentro entre todos los agentes implicados: vecinos, entidades, técnicos municipales, educadores y jóvenes, entre otros. A lo largo de dos días, abordarán los problemas de convivencia. Rossell detalló que esto se hará “empoderando a los jóvenes, que son una parte de los causantes de estos problemas, para que se hagan partícipes dotándoles de las herramientas y los recursos suficientes, o que ellos los propongan, para que las propuestas sean más asumidas”. Más allá del caso de la plaza de les Nacions, el edil especificó a SEGRE que “no descartamos que esta iniciativa pueda llevarse a cabo en otros puntos, como el Parc de Sant Eloi o la parte posterior del pabellón polideportivo”.
La Policia Local levanta 43 actas por consumo o tenencia drogas La Policia Local de Tàrrega levantó el año pasado 43 actas de denuncia por consumo o tenencia de sustancias estupefacientes en la vía pública, 5 en la plaza de les Nacions. Fuentes policiales confirmaron que los actos vandálicos en la zona, especialmente en la estación de autobuses, son habituales. De hecho, en los baños públicos recientemente han instalado una puerta de hierro para poder cerrarlos por la noche y en la sala de espera de la estación hay un cartel que prohíbe la entrada a los que no son usuarios del autobús.
