El Canal d'Urgell abordará en septiembre la modernización de 10.000 hectáreas

La comunidad general de regantes del Canal d’Urgell quiere tener listos en septiembre los proyectos de modernización de un 13% de las 75.000 hectáreas de la zona regable. Así lo dijo ayer su presidente, Amadeu Ros, en la jornada Reg i Futur de Mollerussa, en la que que instó a la Generalitat a “capitanear” una reforma que podría concluir en 7 años.

La comunidad de regantes del Canal d’Urgell confía en tener listo en septiembre el proyecto ejecutivo para la modernización de unas 10.000 hectáreas de la zona regable. Así lo anunció ayer el presidente de la entidad, Amadeu Ros, que aseguró que “si se completa en 7 años será un éxito”. También remarcó que una vez se inicien los trabajos de mejora de las 75.000 hectáreas “habrá una revolución porque todo el mundo lo querrá, ya que se habrá conseguido una buena financiación”. Ros explicó que en estos momentos también se está ultimando la evaluación ambiental de toda la zona regable que estará lista en seis meses. Ros hizo estas declaraciones en la 19 jornada Reg i Futur que se llevó a cabo en el teatro L’Amistat de Mollerussa y que contó con la participación de la consellera de Agricultura, Teresa Jordà. Ros instó a la Generalitat a “capitanear” el proyecto de modernización y aseguró que si no lo hace, no les importará ir “a donde convenga” para defender su proyecto, ya sea a Madrid o a Bruselas.

Por su parte, Jordà anunció que su departamento destinará 1,3 millones de euros a los proyectos ejecutivos de modernización. En este sentido, remarcó el compromiso “firme y real” del departamento a seguir impulsando la modernización de los regadíos ya que “el agua es futuro y se debe considerar tan importante como la L9 del Metro” de Barcelona.

El presidente de los regantes pide a la Generalitat que “capitanee” todo el proceso

Por este motivo, los presupuestos de 2020 destinaran 58,6 millones de euros a proyectos de regadío en Catalunya. El alcalde de Mollerussa, Marc Solsona, instó a extender la modernización a nivel comunicativo “para poder explicar muy bien la importancia del agua” mientras que el presidente del consell comarcal, Rafel Panadés, apostó por que el Espai Cultural dels Canals d’Urgell explique esta evolución.

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La modernización usará un sistema sostenible de bajo coste energético. Así, para conseguir la presión del agua se usará energía fotovoltaica. Solo habrá un “mínimo” de factura eléctrica, que el Canal ha calculado en unos 8 euros por hectárea y año. Actualmente, el coste es de 300 euros por hectárea y año. El regadío se hará por aspersión y goteo y esto permitirá ampliar el abanico de cultivos de este territorio. La comunidad de regantes, sin embargo, quiere que la modernización no sólo afecte al regadío, sino que se convierta en una nueva oportunidad para el territorio. Por este motivo, anunció nuevos proyectos de colaboración con la Diputación para “hacer efectivo el potencial valor económico, social y ambiental de la modernización para el conjunto del territorio”, tal y como explicaron la asesora de innovación y desarrollo local de la Diputación, Teresa Botagues, y Xavier Díaz, director de los regantes del Canal d’Urgell en la jornada La modernización pera la transformación del territorio. Esta colaboración permitirá optimizar los recursos procedentes de Europa. Dos ejemplos de colaboración son, por una parte, el proyecto Paisatges de Ponent, valorado en 4,7 millones de euros para la conservación y mejora del patrimonio de Ponent. Subvencionado por el Feder, incluye la mejora del recorrido y el entorno natural de la zona del Canal. Asimismo, está el proyecto Agrobiofood Ponent, que asciende a 3,7 millones de euros y que permitirá identificar los servicios ecosistémicos que presta el sistema agrario y natural de la zona regada por els Canals y ejecutar una prueba piloto de modernización con criterios de infraestructura verde. El presidente de la Diputación, Joan Talarn, defendió la modernización del Urgell como “una propuesta innovadora, desde el punto de vista de la transformación del territorio, la racionalización del uso del agua, la reducción del coste energético y la adaptación del sistema hidráulico de los canales al nuevo modelo climático”.