El Segrià, indignado porque el vertedero de Seròs resucita al mes de abrir el de Riba-roja

El resurgir del proyecto del vertedero de Seròs (ver SEGRE de ayer) desató ayer indignación en el Segrià. Consell, alcaldes y entidades tanto del sector agrario como ecologistas expresaron su frustración al comprobar que vuelve a estar sobre la mesa de la Generalitat tras años de lucha para pararlo. Resucita apenas un mes después de la apertura del vertedero industrial de Riba-roja, a solo ocho kilómetros y medio de las parcelas donde el grupo TMA proyecta construir el suyo. Son terrenos más próximos a los núcleos urbanos de Almatret y Maials que al de Seròs (ver datos). Los contrarios a esta iniciativa aseguraron que volverán a oponerse y emplearán para ello todos los recursos disponibles.

El alcalde de Maials y presidente del consell, David Masot, aseguró que “lucharemos con todos los recursos disponibles para que el proyecto no salga adelante”. En la misma línea se expresó el alcalde de Almatret, Jordi Tarragó, que lamentó que “con lo que costó detenerlo la última vez, parece que el Govern se ría de nosotros”. Aludía así a los recursos judiciales que, en 2017, anularon los permisos que la Generalitat había otorgado al vertedero en 2013. “¿Qué somos? ¿El vertedero de Catalunya?”, añadió, en referencia al recién inaugurado depósito de Riba-roja. También el alcalde de La Granja d’Escarp, Manel Solé, aseguró que “hay unanimidad y lucharemos con beligerancia”, ya que “el proyecto choca con los esfuerzos de la comarca para potenciar la payesía y abrir nuevas oportunidades de negocio como el turismo de floración”. También la asociación ecologista Ipcena calificó ayer el proyecto de “aberración”. El anterior consistorio de ERC en Seròs fue favorable al vertedero. El actual gobierno de JxCat no se ha pronunciado aún, si bien sus ediles se mostraron contrarios cuando estaban en la oposición.

Por su parte, el alcalde de Seròs no quiso pronunciarse al respecto.