Los Mossos imputan a siete conductores por abandonar el lugar de un accidente en Lleida

Los Mossos d’Esquadra denunciaron penalmente el año pasado a siete conductores en las comarcas leridanas por abandonar el lugar de un accidente. Se trata de las primeras imputaciones por esta conducta en la carretera después de entrar en vigor la reforma penal que castiga con prisión que un conductor se vaya del lugar de un siniestro. Una reforma promovida por la vecina de La Seu d’Urgell Anna González, que luchó durante años para reformar la ley después de que su marido muriera atropellado por un camionero y se diera a la fuga. Según la reforma, el abandono del lugar del accidente se castiga con penas de entre seis meses y cuatro años de cárcel y la retirada del carnet de conducir entre uno y cuatro años. Hasta ahora, el Código Penal solo contemplaba como delito la omisión del deber de socorro, pero era muy difícil poder imputar este tipo de delitos a los conductores que abandonaban el lugar del accidente. Ahora, el simple hecho de irse ya está penado. Según los datos facilitados por los Mossos a SEGRE, el año pasado se imputó este delito a siete conductores, todos ellos en Ponent.

En total, los chóferes imputados por delitos de tráfico vuelven a aumentar un año más y en 2019 los Mossos llevaron a los tribunales a un total de 785 conductores en la provincia de Lleida. Esto supone un aumento del 4%. Por delito contra la seguridad en el tráfico, la Policía catalana imputó a 347 conductores por circular bajo el consumo de alcohol y drogas, lo que supone el 44,2% del total de chóferes imputados. Según el balance, destaca un aumento muy significativo de los chóferes que acabaron ante el juez por exceso de velocidad. En 2019, los Mossos imputaron a 22 personas frente a las 10 de un año antes. En la región policial de Ponent, este delito se multiplicó por dos el año pasado. Asimismo, tras el consumo de alcohol y drogas, circular sin carnet es el segundo delito con más imputaciones en la provincia, con 248 investigados en las comarcas leridanas, el 31,6% del total de imputados. Otros 24 chóferes fueron denunciados por homicidio y lesiones imprudentes y otros 39, por conducción temeraria.

Más de 3.800 chóferes ante el juez por delitos de tráfico en 5 años Los Mossos d’Esquadra han imputado a un total de 3.868 conductores por delitos de tráfico en los últimos cinco años, casi la mitad de ellos por circular al volante bajo los efectos de alcohol y drogas. Según los datos facilitados por la Policía catalana, entre 2015 y 2019 un total de 1.840 chóferes de la provincia de Lleida han sido denunciados penalmente por conducir ebrios y drogados, mientras otros 520 se negaron a someterse a las pruebas. Entretanto, cerca de 1.300 conductores acabaron en el juzgados por circular sin carnet, ya sea por pérdida de puntos, retirada judicial o porque nunca se habían sacado la licencia. En cinco años, otros 63 leridanos han sido imputados por circular a una velocidad punible, y otros 82 fueron acusados de homicidios y lesiones imprudentes. En cinco años, del balance policial destaca el año 2017, cuando se dispararon las imputaciones, sobre todo por el consumo de alcohol y drogas al volante, con casi medio centenar de investigados. Mientras, 2018 fue el año con más conductores investigados por homicidios imprudentes al volante, con un total de diez.