Las empresas de rafting del Sobirà siguen con la persiana bajada a pesar de entrar en fase 2
Las autoescuelas del Alt Pirineu están cerradas como muestra de protesta y las residencias todavía no pueden recibir visitas
Las empresas de rafting del Pallars Sobirà siguen cerradas a pesar de poder operar. La fase 2 de la desescalada permite en el sector del turismo activo trabajar con grupos de hasta 20 personas. Florido Dolcet, presidente de la Asociación de Empresas de Deportes de Aventura del Pallars, ha recordado que ya podían trabajar en fase 1 pero que sin movilidad entre regiones sanitarias y sin unos protocolos claros de seguridad, distanciamiento e higiene, no lo harán. La fase 2 también permite abrir a las autoescuelas pero tampoco lo han hecho, en este caso para protestar por la falta de examinadores.
Las residencias de personas mayores podían empezar a recibir visitas este lunes pero la falta de la autorización de Salud ha hecho que tengan que esperar a hacerlo durante la semana.