Alcaldes del Alt Urgell exigen mantener los vigilantes anti-fuegos

La decisión de la conselleria de Interior de desmantelar el cuerpo de vigilantes forestales y de sustituir el trabajo humano en las torres de vigilancia por cámaras de vigilancia ha puesto en pie de guerra a algunos alcaldes del Alt Urgell, que han redactado una moción conjunta para reivindicar la función de estos profesionales que aprobarán en los plenos de las diferentes corporaciones a lo largo de las próximas semanas. Peramola ha sido uno de los primeros de la comarca en aprobar el texto. De hecho, el municipio cuenta con la única torre de vigilancia del Alt Urgell que el pasado verano todavía estuvo en funcionamiento, la torre del Coscollet, sobre el pantano de Oliana. Su alcaldesa, Gemma Orrit, consideraba ayer “un gran error” la decisión de Interior de “perder el factor humano de la vigilancia de incendios” y lamentaba “la gestión tan deficiente de los bosques” que lleva a cabo la administración catalana. Además, lamentó que las cámaras que sustituirán la vigilancia profesional “todavía no están instaladas”. Por su parte, el alcalde de Les Valls de Valira, Ricard Mateu, explicó que aprobarán la moción en el próximo pleno y consideró que “el desmantelamiento de estos puntos nos afecta a todos porque los incendios no entienden de límites municipales ni fronteras”. Catalunya cuenta con 48 torres de vigilancia. A parte de la del Alt Urgell, el Solsonés cuenta con una torre en la zona de la Serra Seca; la Noguera, en el Pic de Gualter; el Pallars Jussà, en Boumort; y la Cerdanya, en Coll de Midós (Lles de Cerdanya).

En otro orden, Endesa incorpora las gafas de realidad virtual y real como herramienta para gestionar los bosques y ejecutar talas y podas que eviten riesgos cerca de instalaciones eléctricas. Para ello, ha adquirido diez cascos con lentes integradas y desarrollará un software que permite ver con tecnología holográfica. El modelo en 3D de los bosques se generará con datos recogidos con escáneres de tecnología láser cerca de todas las líneas de alta tensión. Desde un helicóptero se han hecho revisiones termográficas y con drones se ha comprobado el estado a pie de línea. En total, Endesa ha destinado este año cerca de 2,9 millones en Lleida en el plan anual para la campaña de protección de los bosques, presentado ayer.