Medio centenar de municipios de Lleida siguen libres de coronavirus desde el inicio de la pandemia, menos que en abril

Más de cincuenta municipios de Lleida están libres de coronavirus desde el inicio de la pandemia, pero sus vecinos aplican las medidas precauciones que allí donde sí hay contagios. Llevan mascarillas y mantienen entre sí las distancias de seguridad, conscientes de que siempre existe el riesgo de exponerse al virus. No en vano, estas localidades están rodeadas de otras que sí han registrado casos. Conforman un archipiélago de pueblos que han esquivado la Covid-19, al menos por ahora. Son uno de cada cuatro de los 231 de la provincia, aunque su número era mayor en abril, cuando eran más de 75.

Fulleda es uno de estos municipios libres del virus. Vecinos y ayuntamiento apuntan que la movilidad y la actividad es muy inferior a la de ciudades y pueblos grandes. Asimismo, tener una población de 85 personas facilita mantener las distancias. “En una fiesta o acto podemos ser 20 o 25”, explicó el alcalde, Jordi Arbós. Vecinos apuntaron que tener contagios es hasta cierto punto “una lotería”. Esto se debe a que ningún pueblo está del todo aislado del exterior. En Fulleda, algunos vecinos hacen la compra fuera, aunque hay tiendas de alimentos de otros municipios que les sirven a domicilio. Ultimamente, varios optan por ir a Montblanc en lugar de Les Borges, al considerar que está más cerca de Lleida y tiene una relación más estrecha con la capital confinada.

El ayuntamiento lamenta las restricciones pese a no tener contagios desde el inicio de la pandemia

Els Omells de Na Gaia es el segundo municipio menos poblado del Urgell con 140 habitantes y el único sin Covid-19. El alcalde, Delfí Escoté, destacó que hay un factor “suerte”, aunque recalcó que “los vecinos respetan las medidas de prevención”. En el Cafè dels Omells las fomentan hasta el punto de obsequiar a clientes con una mascarilla tras varias consumiciones. Vecinos apuntaron que cada tarde hay solo entre 5 y 10 personas en las piscinas, intentan salir solo una vez cada 2 o 3 semanas para comprar.

Almatret, el único pueblo del Segrià sin Covid desde el inicio de la pandemia, empieza a recibir vecinos que residen en Lleida y personas con segundas residencias. Unos y otros elevan cada verano la población de los poco más de 300 censados a medio millar. El alcalde, Jordi Tarragó, explicó que observan las medidas de seguridad con tanto o más rigor que los que residen en el pueblo todo el año.El consistorio ha expresado su malestar ante la Generalitat al estar sujetos a restricciones como reducir al 50% el aforo de bares y restaurantes pese a no tener contagios. “Se aplican sin atender a lo que pasa en cada pueblo y nos sentimos ignorados”, dijo Tarragó. También se ha quejado La Granja, aún confinada tras haber dado de alta al último contagiado y sin fiesta mayor (ver página 43).