Dos sabotajes en la línea de tren de la costa obligan a viajar por carretera a 500 pasajeros

La línea de tren que une Lleida y Barcelona por la costa (R-13 y R-14) sufrió ayer dos sabotajes que obligaron a viajar en autocar a 500 pasajeros y provocó retrasos de hasta una hora. En la madrugada de ayer, aproximadamente a las 01.45 horas, unos desconocidos quemaron ruedas y palets sobre la vía a la altura de Vinaixa, lo que causó daños en la infraestructura y provocó que se tuviera que ofrecer servicio alternativo por carretera. Fuentes de Adif explicaron que el fuego afectó a aproximadamente 2 kilómetros de catenaria y varios trenes de mercancías no pudieron circular. La incidencia impidió el paso de tres convoyes y unos 80 pasajeros tuvieron que ir en autocar entre Lleida ciudad y Sant Vicenç de Calders, según informaron fuentes de Renfe. Este primer sabotaje fue reivindicado por el colectivo independentista L’Estaca a través de la aplicación de mensajería Telegram y anunciaron más movilizaciones.

La circulación se restableció alrededor de las 12.40 horas, después de reparar los desperfectos provocados por el fuego. No obstante, a las 14.30 se volvió a interrumpir a causa de una cuerda colgada en la catenaria entre L’Epluga de Francolí y Montblanc. Esta incidencia obligó a ofrecer transporte por carretera entre Lleida y la capital de la Conca de Barberà y afectó a 420 personas y a 5 trenes, según Renfe. Fuentes de Adif señalaron que estudiarán todos los daños y denunciarán los hechos a los Mossos d’Esquadra.

Estos dos sabotajes en las líneas ferroviarias que comunican Lleida con la costa se suman a los que tuvieron lugar en otros puntos de Catalunya. En Les Borges del Camp tiraron cemento e inutilizaron el cambio de agujas y en La Pobla de Massaluca colocaron una cuerda en la catenaria. Desde Adif y Renfe aseguraron que por la tarde, se registró otro sabotaje entre Castellbisbal y Rubí.