Las piscinas de verano de Mollerussa han tenido un 63% menos de visitas que en 2019

Las piscinas de verano contabilizaron un total de 26.230 entradas, un 63% menos que el año pasado, cuando hubo 70.400. Respecto a los abonos por temporada, sólo se vendieron un tercio respecto a los de 2019 (1.112 ante 3.281). Los usuarios prefirieron adquirir entradas por un día, que han subido de las 3.562 del año pasado a las 5.885 de este año. También han bajado los usuarios que han participado en cursillos y pasan de 911 en 2019 a 282 este verano. El alcalde, Marc Solsona, remarcó que este año las piscinas abrieron 15 días más tarde y que el descenso de visitantes también ha comportado sufrir menos incidentes, por lo que al final se optó por prescindir del servicio de seguridad externo tras tres semanas de servicio y avisar a la policía cuando hubo alguna problemática.

Tras el cierre de estas instalaciones de verano, abren el próximo lunes la piscina cubierta, aunque los cursos empezarán el día 1 de octubre. Este año se ha optado por ampliar el número de cursos hasta llegar a los 80 (ocho más que el curso pasado) para evitar aglomeraciones de usuarios. A todos los participantes se les tomará la temperatura al acceder y también deberán aplicarse gel hidroalcohólico.

Este curso, las instalaciones no acogerán actividades extraescolares de las Ampa y sus franjas horarias se destinarán al público en general. Para evitar aglomeraciones en la zona del vestíbulo, no se permitirá la presencia de familiares, que tampoco podrán acceder a la zona de vestidores, a no ser que el usuario necesite ayuda para cambiarse.

Las inscripciones se podrán llevar a cabo a partir del día 18. Se podrá hacer desde la página web de la entidad o presencialmente en las oficinas de este equipamiento. Unas 485 personas ya se preinscribieron en este equipamiento en julio.