Los pleitos por el agua amenazan proyectos de futuro en la Segarra

Los pleitos entre alcaldes y consell por el abastecimiento de agua en la Segarra ponen en juego el futuro de los proyectos pendientes por la poca capacidad de endeudadamiento que tiene la entidad comarcal. Según su presidente, Francesc Lluch, de momento, la defensa de los 5 pleitos presentados ha supuesto ya un desembolso de más de 50.000 euros, “cantidad similar a la que deben haber gastado los ayuntamientos y no hay forma de alcanzar un acuerdo ya que la otra parte no se presta a dialogar”, refiriéndose a los alcaldes de Sant Ramon, Aleix Bochaca, y de Talavera, Ramon Trullols, a quienes el día 16 se les propuso una mesa de diálogo para llegar a un acuerdo pero no acudieron. Cabe señalar que el pasado mes de junio sucedió algo similar. Además, ahora, Bochaca y Trullols han llevado a casación y al Tribunal Supremo el contencioso ganado por el consell en marzo por las competencias sobre el agua. Lluch envió ayer jueves una tercera carta pidiendo un encuentro para solucionar el problema.

Por su parte, el consell impugnó la sentencia del TSJC favorable a los alcalde de Sant Ramon, Tarroja, Granyena, Granyanella y Talavera sobre las nuevas tarifas del agua que igualaban el precio en toda la comarca ya que antes Cervera y Guissona pagaban el 80% del coste. Los alcaldes argumentaron que las tarifas se aprobaron sin seguir la tramitación preceptiva. Se trata del contencioso de mayor problemática y cuantía y que, según Bochaca, se resolverá este octubre. Según el alcalde, si el TSJC ratifica la sentencia inicial, el consell deberá devolver parte del dinero cobrado en los últimos 4 años a 19 municipios y volver a la tarifa antigua. “Es una guerra por capítulos en la que he tenido que saltar muchos muros y aguantar muchas presiones”, dijo.

Cinco contenciosos que enturbian la relación de Junts y ERC en la comarca La resolución de estos conflictos será el último capítulo de un total de 5 contenciosos liderados por el alcalde de Sant Ramon, de Junts, contra el con-sell, liderado por ERC. Ya en 2016 iniciaron las tramitaciones por vía judicial. Para Francesc Lluch, “poner fin a estos contenciosos es clave para resolver el histórico conflicto entre ERC y Junts (antes CiU) en la Segarra”. En este sentido, para Lluch “lo único que provoca son cortapisas al normal funcionamiento de la entidad comarcal”. Los otros contenciosos hacen referencia a infraestructuras para determinar si pertenecen al consell o a los ayuntamientos, como la conexión del Segarra-Garrigues, por haberla aprobado solo en el consell sin haberse hecho antes en cada ayuntamiento.