Endesa rescata peces en canales de Lleida para vaciarlos y hacer mantenimiento
Endesa, mediante su división de energías renovables Enel Green Power, empezará el lunes el vaciado periódico de los canales de Balaguer y Térmens, en la Noguera, y de Lleida, en el Segrià, con el objetivo de realizar varios trabajos de mantenimiento y mejora. La actuación mantendrá secos los conductos durante cinco semanas y comportará el paro de las centrales hidroeléctricas de Balaguer, Térmens y Lleida. El vaciado progresivo de estos tres canales industriales se hará también la semana del 12 de octubre en el canal de Seròs (Segrià), que se encuentra aguas abajo de la presa de Lleida, ubicada en el parque de la Mitjana. Antes de vaciarlos completamente, sin embargo, se rescatará la fauna piscícola y otras especies que habitan en estos ecosistemas.
El conjunto de estas actuaciones, que se realizan cada dos años, tendrá una duración de cinco semanas y supone el paro técnico de las centrales de Balaguer, Térmens y Lleida, ya que las tres instalaciones se alimentan del agua que circula por estas infraestructuras situadas en cascada. Así, está previsto que los canales se vuelvan a llenar a mitades de noviembre. En concreto, se mejorará el revestimiento de hormigón armado de las paredes laterales y solera de los canales, así como reparaciones de pequeñas grietas y también la estabilización y acondicionamiento de los caminos de servicio.
Gracias a la buena calidad del agua que circula durante todo el año por estos canales, proliferan y viven numerosos ejemplares de especies tanto de fauna autóctona como de fauna alóctona (invasora), según señalan desde de Endesa. Es por eso que, antes de realizar estos trabajos, y tal como se hace en otras infraestructuras hidroeléctricas, se rescatan los peces que habitan allí con la colaboración y supervisión de los Agentes Rurales.
Para hacer este tareas se utilizan técnicas de pesca eléctrica. Se aplica una pequeña descarga que inmoviliza a los peces unos segundos, los necesarios para capturarlos con salabardos. Todos los peces se van clasificando y, según el tipo de especie, si es autóctona o alóctona, y de tamaño, se depositan en unos tanques isotérmicos, que cuentan con oxígeno, para trasladarlos nuevamente al río. Con respecto a las especies invasoras, y de acuerdo con la normativa catalana vigente en materia de pesca continental, se sacrifican y posteriormente se entregan al Centro de Fauna de Vallcalent para su utilización como alimento.
La compañía remarca que los trabajos se hacen de acuerdo con su política medioambiental y de un Plan de salvamento aprobado del Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación. Este Plan estipula, entre otros aspectos, las condiciones de rescate de la fauna autóctona y la gestión de la fauna invasora como la cronología planificada, material a utilizar, participantes, sistema de confinamiento de los ejemplares rescatados, medios de transporte o los lugares donde se liberarán. Es por eso que todo este proceso cuenta con la ayuda y supervisión del Cuerpo de Agentes Rurales.