ESQUÍ NUEVA TEMPORADA
FGC se queda Boí Taüll, con un déficit de 1,5 millones el pasado invierno
Asume la propiedad y la gestión directa, algo que la Ribagorça esperaba desde hace más de un año|| Garantía de futuro para el complejo, con 140 empleos directos
La estación de esquí de Boí Taüll pasará en breve a manos de Ferrocarrils de la Generalitat (FGC), una operación que la Alta Ribagorça esperaba desde hacía más de un año y que ayer recibió al fin el visto bueno del Consell Executiu. La consellera de Presidència, Meritxell Budó, recalcó que esto garantiza la apertura del complejo el próximo invierno, que genera unos 140 empleos directos y 300 indirectos. Asimismo, reveló que las pistas cerraron la pasada temporada con un déficit de explotación de 1,5 millones, una cantidad que sufragará la empresa pública Avançsa, su actual propietario.
Ferrocarrils pasará así a tener la propiedad del dominio esquiable de la Alta Ribagorça y asumirá su gestión directa, del mismo modo que Port Ainé y Espot Esquí, en el Pallars Sobirà. Boí Taüll es propiedad de la Generalitat desde diciembre de 2014, cuando su anterior titular, el grupo inmobiliario Nozar, la entregó como dación en pago de deudas con el Insititut Català de Finances (ICF). El Govern la puso en manos de la empresa pública Avançsa, que la explotó desde entonces a través de una sociedad creada con este fin, Actius de Muntanya. Nozar siguió al frente del complejo como arrendatario, si bien renunció al contrato en 2018. Las pistas abrieron los dos últimos inviernos bajo gestión pública directa. Por su parte, FGC ejerció como asesora y elaboró un plan de viabilidad para la estación de la Alta Ribagorça.
Es propietaria de Boí Taüll desde 2014 y asumió la gestión en 2018 al renunciar Nozar al arrendamiento
El acuerdo del Executiu prevé que Avançsa entregue de forma gratuita su participación del 100% de Actius de Muntanya a Ferrocarrils. El Govern valora en 13,1 millones esta transmisión. Asimismo, la actual propietaria deberá condonar un crédito de 1,2 millones otorgado a su filial Actius de Muntanya, y destinar 1,5 millones de su remanente de tesorería a enjugar el déficit de explotación de la temporada 2019-2020. FGC incluirá así a Boí Taüll en los preparativos de una temporada de esquí marcada por la crisis sanitaria (ver desglose).
Preparativos para una temporada marcada por la crisis sanitaria
Ferrocarrils se sirvió ayer de un helicóptero para montar los balancines en remontes de Port Ainé. Esta operación forma parte de los preparativos de la nueva temporada de esquí, que estará condicionada por la crisis sanitaria. FGC aumentará las tareas de limpieza y desinfección en los edificios de sus diferentes estaciones y avanzará en la implantación del forfait digital para evitar colas frente a las taquillas. Diluir las aglomeraciones de esquiadores es, precisamente, una de las prioridades del sector del esquí para el próximo invierno. Además del forfait digital e impulsar el uso de apps de telefonía móvil, las estaciones prevén también acelerar en lo posible los remontes para evitar colas de usuarios.