Les Borges supera el brote aunque siguen activos los de Sort y Verdú
Un muerto en el geriátrico de la capital del Sobirà y dos más en el Mare Marcel·lina, intervenido por Salud
Imagen de archivo del exterior de la residencia Mare Marcel·lina de Verdú
Uno de los usuarios de la residencia Àngel Serafí de Sort que había dado positivo en Covid- 19 murió el fin de semana. Fuentes próximas explicaron que hay 15 mayores positivos, 7 trabajadores contagiados y otros 3 profesionales confinados. Por su parte, fuentes de la conselleria de Salud cifraron en 14 los residentes positivos y señalaron que hay 9 empleados contagiados. Asimismo, en el geriátrico Mare Marcel·lina de Verdú, intervenido por Salud tras detectar un brote, ha habido dos defunciones más, por lo que ya son 11 los fallecidos. Cabe recordar que, en este centro del Urgell, 47 de sus 48 mayores han dado positivo.
Mientras, el geriátrico de Les Borges ya ha superado el brote de Covid que se detectó a principios de octubre y que se cobró la vida de 7 usuarios. Fuentes de L’Onada, la empresa que gestiona el centro, explicaron que todos los PCR de la semana pasada han dado negativo. Por su parte, la residencia Castrillón de Lleida ciudad ya acumula 19 casos. En concreto, han dado positivo 12 usuarios y 7 trabajadores, según Salud. Este es el segundo brote en el centro, después del de finales de junio. En la residencia Sant Domènec de Balaguer hay otroserían 16, y un trabajador más contagiado, con lo que en total habría 6, según de Salud. Además, también ha dado positivo un empleado de la residencia de Bellvís. Fuentes del centro explicaron que están pendientes de los resultados de un cribado. Por otra parte, el ayuntamiento de Ponts se reunió ayer con la dirección de la residencia, comité de empresa y UGT para abordar la situación tras las críticas del sindicato, que denunció presuntas coacciones a trabajadores para cubrir turnos en días de descanso. La alcaldesa, Solés Carabassa, dijo que mantendrán reuniones para encontrar soluciones y descartó una investigación porque “se han calmado mucho los ánimos”. Estela Guerra, de UGT, pidió mejoras en los horarios, turnos y calendarios laborales y reclamó “una solución lo antes posible”.
En otro orden, la residencia Sant Antoni de Tàrrega ha recibido apoyo de la Fundació la Caixa y Caixabank para comprar camas articuladas
