FAUNA GRANDES DEPREDADORES
Detectan 6 osos más y su censo en el Pirineo supera por primera vez el umbral de los 60
Análisis de ADN corroboran que tres individuos nacidos entre 2015 y 2017 siguen en la cordillera || Seis camadas este año suman una docena de oseznos, tres más que los contabilizados hasta septiembre
Una osa y un osezno fotografiados el pasado verano en el Pallars.
La población de osos en el Pirineo ha superado por primera vez el umbral de los sesenta ejemplares, a raíz del descubrimiento de seis individuos más. Tres de ellos son plantígrados nacidos entre 2015 y 2017, indentificados por primera vez este año a través de análisis genéticos de muestras de heces y pelo. Asimismo, se han detectado seis camadas que suman una docena de oseznos nacidos este año, tres más que los contabilizados el pasado mes de septiembre. Con ellos, el censo de plantígrados en la cordillera se sitúa en 65 ejemplares, a las puertas del invierno y del periodo de hibernación.
Así se desprende de los últimos datos del departamento de Territorio, después de que, el pasado mes de octubre, la Generalitat pusiera en común sus cifras con las del Conselh Generau d’Aran y el Gobierno francés. Los análisis genéticos han identificado a una hembra conocida como Aran, nacida en 2015 y que ha tenido este año dos oseznos con el macho Nere. Los test de ADN también han corroborado la presencia en la cordillera una hembra y un macho nacidos en 2017, denominados New 18-11 y New 18-10. Estos tres ejemplares se han sumado al censo del año 2019, que asciende así hasta los 55 ejemplares. Cabe señalar que la población de osos se establece de forma anual y se basa en los avistamientos y rastros detectados a lo largo del año anterior. Los que no son detectados durante más de dos años se consideran muertos.
La población de osos se sitúa en 65 ejemplares, 24 años después de las primeras reintroducciones
A los ejemplares ya existentes en 2019, se suman los nacidos este año. A la espera de análisis genéticos para identificar a cada individuo, las cifras de la Generalitat apuntan por ahora a media docena de camadas con doce nuevos oseznos. Asimismo, ha habido también dos bajas notables, que han sido objeto de polémica: la de Cachou, hallado muerto en Aran en abril; y la de otro macho sin identificar, tiroteado en la región francesa de Ariège. Las dos muertes son objeto de investigaciones judiciales a ambos lados de la frontera.
Se espera que los osos se recluyan en sus madrigueras a mediados de mes, a medida que bajen las temperaturas. La semana pasada aún hubo algunos avistamientos y rastros. La población de osos en el Pirineo avanza de forma constante, 24 años después del inicio de la reintroducción de esta especie.
