ESNOTICIA
La hostelería sale a la calle en contra de su cierre y reclama ayudas directas
Movilización en Tàrrega y el sector prepara más para la semana que viene en Lleida
Propietarios y trabajadores de bares, restaurantes y locales de ocio nocturno salieron ayer a la calle en Tàrrega en contra de la decisión de la Generalitat de mantener el cierre del sector hasta el 23 de noviembre, cuando empezará la desescalada. la Federación de Hostelería anunció más movilizaciones para el próximo miércoles en Lleida.
La hostelería salió ayer a la calle en Tàrrega para mostrar su indignación ante la prórroga del cierre del sector hasta el próximo 23 de noviembre. Es a partir de ese día cuando la Generalitat plantea empezar la desescalada de las actuales restricciones impuestas por la Covid, lo que supondrá reabrir las terrazas de los bares y restaurantes (ver SEGRE de ayer). La hostelería lleva cerrada aproximadamente un mes, después de que el Govern así lo ordenara para frenar el auge de contagios de coronavirus. Ante la situación del sector, bares y restaurantes de Catalunya preparan una movilización que tendrá lugar el martes en Barcelona y la Federación de Hostelería de Lleida anunció otra en Lleida para el miércoles.
En Tàrrega, más de un centenar de personas (entre las que se encontraban 71 propietarios de los 83 bares, restaurantes y locales de ocio nocturno que hay en la ciudad) se concentraron en la plaza Major para reclamar “ayudas reales y directas” así como “medidas de rescate al sector, ya no es una urgencia, es una emergencia”. Aceptan con “resignación” tener que seguir cerrados, aunque defienden que se les culpabiliza injustamente. A cambio, piden apoyo por parte de las instituciones. Los hosteleros mostraron su indignación y enfado “con la inoperatividad de las administraciones”. Fue una concentración silenciosa para simbolizar “la muerte de un sector que se encuentra al límite”. Jesús, propietario del bar Punt de Trobada, criticó que “somos dos autónomos en el local que aún no hemos recibido ninguna ayuda, nos han pasado el impuesto de autónomos, y tenemos un trabajador en ERTE, que aún no ha cobrado y del que seguramente tendremos que pagar la Seguridad Social como ya hicimos el mes pasado”. Mientras, Joan, trabajador del bar Juventud, dijo que “es una situación injusta, ves el metro de Barcelona y el transporte con más gente y más riesgo, mientras que en la hostelería, de poco riesgo, es poco responsable hacer cerrar a todo el sector con muchas personas en ERTE sin haber cobrado nada como es mi caso”.
Bares, restaurantes y cafeterías llevan casi un mes cerrados por las restricciones del Govern
A nivel municipal, exigen al ayuntamiento de Tàrrega que anule el incremento del 30% de la tasa de basuras para 2021 y que retorne la parte correspondiente de los meses en los que se han visto obligados a cerrar. También reclaman que el consistorio impulse una campaña de promoción del pequeño comercio y restauración con vales de descuento. No obstante, agradecen que el año que viene tampoco se les cobre la tasa de terrazas.
En este sentido, la alcaldesa, Alba Pijuan, reconoció que “su actividad económica se ha visto muy tocada y somos conscientes de la precaria situación del sector”. A pesar de eso, defendió que como ayuntamiento es “al que más hemos ayudado”. En cuanto a la petición de anular el aumento del 30% de la tasa de basuras, afirmó que es “imposible”, ya que “es un servicio que se basa en su coste” y en relación a la iniciativa para incentivar el comercio con bonos, dijo que “la situación económica del ayuntamiento no nos permite hacer campañas de este tipo que tengan un retorno importante real” aunque avanzó que “estamos a punto de iniciar una nueva campaña de reactivación de la economía local”.
El próximo jueves se reunirá con el sector.
“Abrir las terrazas bajo un mar de niebla es como seguir cerrados” Opiniones contrapuestas entre propietarios de bares y restaurantes de Tàrrega por la posibilidad de iniciar la desescalada el 23 de noviembre empezando con las terrazas. Algunos consideran que es una “locura” y una propuesta “hecha desde un despacho de Barcelona sin tener en cuenta la meteorología de Lleida”. Desde el restaurante El Gat, gestionado por el Grup Alba, afirmaron que “en Ponent abrir las terrazas bajo un mar de niebla es como seguir cerrados”. Jesús, del bar Punt de Trobada, dijo que “en la provincia de Lleida con estas nieblas y este frío no se puede abrir”. Otros se mostraron más optimistas. Sebastià, del restaurante Depans, dijo que “todo lo que sea abrir es positivo”. Albert, de La Cava, señaló que “puede ayudar a algunos y para los que no sea posible, que les compensen por otro lado” y apuntó que ”no paramos de refinanciarnos y si seguimos así ya veremos si podremos salir de esta con la maleta que llevaremos encima”.