SUCESOS ESPACIOS NATURALES
Sant Esteve de la Sarga no reabrirá el paso de Mont-rebei si no hay “máximas garantías”
Evalúan el riesgo geológico de la zona del desprendimiento y la Diputación prepara una intervención de emergencia || Otro alud hunde el camino histórico de Baro al santuario de Arboló en el Sobirà
“Hasta que no se lleve a cabo una gestión responsable de todo el congosto y se regulen accesos, parkings y usos, Mont-rebei seguirá cerrado”. Así de contundente se mostró el alcalde de Sant Esteve de la Sarga, Jordi Navarra, después del último alud de piedras que el jueves hundió un tramo del camino natural del congosto, a pocos metros del puente colgante que une Catalunya y Aragón. Añadió que lo lógico es reabrir el sendero “pero hay que hacerlo con responsabilidad y con las máximas garantías de seguridad”. Para el primer edil, el último desprendimiento es un aviso más de la necesidad de gestionar este espacio natural y regular los usos y las actividades, tanto terrestres como acuáticas. De hecho, el convenio entre las diputaciones de Lleida y Huesca para gestionar el desfiladero ya contempla un estudio de seguridad de las actividades y otro geológico sobre el desfiladero y la zona de las pasarelas de Montfalcó, en el municipio de Viacamp. Este estudio debe determinar los riesgos de aludes y proponer distintas medidas correctoras que minimicen el riesgo. Para el alcalde, es clave el plan de emergencias con medidas de protección y prevención y que se establezcan las acciones que se deben llevar a cabo en caso de accidente.
Técnicos del Instituto Geológico y Cartográfico (ICGC) visitaron ayer la zona para analizar el desprendimiento. El lunes lo harán los técnicos de la Diputación de Lleida que conjuntamente con el ayuntamiento de Sant Esteve evaluarán una intervención de emergencia en este tramo del camino natural. También desde la Diputación de Huesca se estudiarán las medidas necesarias para rebrir el congosto. Los mismos técnicos explicaron que primero habrá que inspeccionar la zona para detectar los puntos más inestables donde tuvo lugar la avalancha y sanear la ladera en la que quedaron rocas que pueden desprenderse. Después se deberá rehacer el camino, prácticamente hundido por la grandes rocas. Los tres accesos al desfiladero de Mont-rebei permanecerán cerrados. Por su parte, el alcalde de Viacamp, Alfredo Pociello, aseguró que la afectación puede ser muy grave si el camino no se puede reparar.
Por otra parte, ayer otro desprendimiento de grandes rocas hundió un tramo del camino histórico señalizado entre el municipio de Baro y el santuario de Arboló, en el Sobirà, dentro del Parc Natural del Alt Pirineu. Se trata de un camino muy frecuentado por los vecinos porque transcurre paralelo al río Noguera Pallaresa. Técnicos del parque precintaron ayer el camino hasta que se evalúe el peligro de más desprendimientos. El director del parque, Marc Garriga, apuntó que los técnicos del Cartográfico visitarán la zona en los próximos días para determinar qué actuaciones hay que llevar a cabo e inspeccionar la zona. El alud de rocas se produjo el jueves por la tarde y hasta ayer no se pudo precintar por la dificultad de acceso por las rocas que impedían el paso. “Este tramo del camino está prácticamente desaparecido, las rocas de grandes toneladas lo han dañado en su totalidad y deberemos actuar para rehacerlo y abrirlo”, dijo Garriga. No obstante, aseguró que cualquier actuación de mejora no se llevará a cabo hasta después del invierno.